Hasta el 15 de septiembre permanecerá abierta al público, en forma gratuita, la muestra IMÁGENES DE LA MEMORIA, del fotógrafo chileno Luis Navarro Vega (Altazor 2010). La exposición puede ser visitada de 11:00 a 14:00 y de 15:00 a 20:00 horas, en la Sala Lily Garafulic situada en el primer nivel sur del Centro Cultural Estación Mapocho.
En contexto del ciclo conmemorativo de los 40 años del golpe de Estado, que el CCEM organizó en conjunto con el Instituto Nacional de Derechos Humanos, programa hasta este domingo la exposición “Imágenes de la Memoria” del destacado fotógrafo nacional Luis Navarro Vega (Altazor 2010). La muestra busca rendir homenaje a la imprescindible labor realizada por la Vicaría de la Solidaridad, desde 1976, constituyendo, además, un registro y testimonio de lo ocurrido en dictadura hace 40 años y con ello un patrimonio para la democracia y el nunca más.
La exposición reúne más de sesenta imágenes que retratan hitos de la realidad social y política de Chile en tiempos de la dictadura militar, gran parte de ellas nunca antes exhibidas.
Luis Eduardo Navarro Vega
Nace en 1938, en la ciudad de Antofagasta, en el corazón del norte chileno, es reconocido por su trabajo en la Vicaría de la Solidaridad (1976 – 1981), en su revista Solidaridad y reproduciendo fotografías de las personas detenidas desaparecidas y ejecutadas por motivos políticos durante el régimen dictatorial, que los familiares de las víctimas facilitaban para su proceso de identificación.
En diciembre de 1978, Luis Navarro Vega convierte a la fotografía en un testigo fundamental de la violencia de la Dictadura, capturando el horroroso crimen de los Hornos de Lonquén.
En 1981, sufre las consecuencias de su foto denuncia, siendo detenido por agentes del estado, torturado y puesto en libertad, gracias a la intervención del Cardenal Silva Henríquez y organizaciones internacionales de derechos humanos. Ese mismo año, junto a otros fotógrafos que retratan los hechos vinculados al movimiento social de derechos humanos y la recuperación de la democracia, dan vida a la Asociación de Fotógrafos Independientes (AFI).
Sus fotografías fueron publicadas en prensa escrita opositora al régimen militar como como Hoy, Nueva Aurora, Apsi, Análisis, Pluma y Pincel, y Punto de Vista. Además, se ha desempeñado como fotógrafo del diario La Época (1986 -1988), editor fotográfico del diario Fortín Mapocho (1991 – 1993), fotógrafo editor de la Corporación Cultural de Estación Mapocho (1994 – 2004) y fotógrafo de la Cámara de Diputados (2000- 2004), entre sus más importantes labores.
Ha participado en una serie de libros entre los que destacan: Lonquén; Presencia de niño en Las Américas, Primer anuario de la fotografía chilena, Segundo anuario de la fotografía chilena, Síntesis del Informe Rettig, Fotografías de latinoamericanos, 50° Aniversario de la Declaración de los derechos humanos, La potencia de la memoria, Multitudes de sombras y Geografía poética de Chile.
Durante su carrera ha recibido más de treinta premios en concursos nacionales e internacionales, destacando: Premio Altazor (2011); Premio por tema del PNUD, Naciones Unidas (2005); Primer y segundo premio, 50 años Unión de Reporteros Gráficos (1988); Primer premio, Concurso Internacional Unicef (1980). Y fue declarado “Visitante distinguido de la ciudad de Rosario”, Argentina, el 09 de Mayo del presente año.
Parte importante de su trayectoria hoy forma parte de diferentes archivos que preservan la defensa de los derechos humanos durante la Dictadura Militar de 1973 – 1990, como: “Archivos del Fortín Mapocho” y “Archivo de Derechos Humanos de la Vicaría de la Solidaridad”, el último, es parte del programa de Memoria del Mundo de la Unesco.
Sus últimas exposiciones se han realizado en la ciudad de Montevideo, Uruguay, donde trabajó en conjunto con el destacado fotógrafo Aurelio González, y en Madrid, España, en una exposición colectiva en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Sobre la Vicaría de la Solidaridad
En el mes de Octubre de 1973, el Cardenal de la Iglesia Católica y Arzobispo de Santiago, Monseñor Raúl Silva Henríquez, constituyó en colaboración con otras iglesias del país el Comité de Cooperación para la Paz en Chile, organismo que tuvo como misión prestar asistencia legal y social a las víctimas de las gravísimas violaciones a los derechos humanos que se produjeron a raíz del Golpe Militar del 11 de septiembre de ese mismo año. Más adelante, el 1º de enero de 1976, se creó la Vicaría de la Solidaridad del Arzobispado de Santiago, institución que vino a reemplazar al Comité antes mencionado y que asumió la continuación de su tarea. La Vicaría de la Solidaridad operó durante todo el régimen militar y concluyó sus actividades el 31 de diciembre de 1992.
La historia de esa extensa labor de veinte años se encuentra contenida en una gran cantidad de documentación de un valor incalculable, que es parte insustituible de la memoria histórica de Chile, y que constituye el mayor centro de información sobre derechos humanos existente en el país.