El gobierno de Bolivia anunció el sábado que pidió “un informe oficial” a su par de Brasil por la presunta salida hacia ese país del senador opositor Roger Pinto, quien estuvo asilado durante quince meses en la embajada brasileña en La Paz.
La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, escribió en su cuenta de Twitter que Bolivia “pidió al gobierno de Brasil un informe oficial sobre la presunta huida del senador Pinto de su embajada en La Paz”.
Sin embargo, por el momento, “oficialmente, hasta que Brasil no lo informe por la vía diplomática, el senador Pinto está en la Embajada de Brasil en Bolivia, porque el gobierno boliviano no ha otorgado ningún salvoconducto para el senador ni con destino a Brasil ni a ningún otro país”, había declarado horas antes Dávila, a la Agencia estatal de noticias ABI.
Pero si Pinto “ya no estuviese en Bolivia, su estatus habría cambiado de refugiado a prófugo de la justicia” y estaría “sujeto a extradición”, señaló Dávila, que adelantó que el gobierno del presidente Evo Morales sentará posición en un comunicado posteriormente.
Mientras, la oposición daba por verídica la información de la salida de Pinto, quien asegura ser un perseguido político, hacia el poblado brasileño de Corumbá.
“Hemos recibido la noticia de que el senador Pinto se encuentra en estos momentos en territorio brasileño. Podemos confirmarlo”, dijo a la AFP el diputado de oposición Tomás Monasterio, vía telefónica.
“Queremos manifestar nuestra profunda alegría por esta noticia al entender de que no solamente es un tema de humanidad sino un principio fundamental de respeto a los tratados internacionales en el marco del asilo político”, añadió Monasterio, correligionario de Pinto.
El congresista opositor explicó que conoció sobre la salida de Pinto a través de las personas que atendían al senador derechista en la embajada brasileña de La Paz.
“Él ha salido vía terrestre”, acotó, e indicó que el propio Pinto proporcionará mayores detalles sobre su salida en una conferencia de prensa desde Brasil.
En tanto, Monasterio lamentó “las declaraciones del oficialismo que, a través de distintas vocerías, han anunciado que el senador Pinto habría fugado”.
“El no ha huido, ha recurrido a la figura del asilo político bajo un control minucioso del gobierno brasileño”, aseguró.
La hija de Pinto no quiso confirmar la versión de la salida de su padre.
“No puedo dar ninguna información, me gustaría que esperen hasta el lunes. Nosotros vamos a dar una información ya sea confirmando o desestimando esa versión, no queremos que se especule porque se pone en riesgo la seguridad de mi familia”, explicó Dennis Pinto a la AFP.
Más temprano, la parlamentaria opositora Norma Piérola, también colega política de Pinto, reveló que éste habría salido de Bolivia “entre el viernes y la madrugada del sábado”.
El legislador opositor, de 53 años, buscó refugio en mayo de 2012 en la legación brasileña, argumentando persecución política, tras presentar denuncias de corrupción contra el oficialismo.
Brasil le otorgó el asilo político, pero el gobierno boliviano no le había otorgado el salvoconducto alegando que su caso no era político sino judicial.
En junio, un tribunal de sentencia condenó a Pinto a un año de cárcel por daño económico al Estado, aunque su defensa replicó que se trata de “un fallo político” destinado a entorpecer su salida del país, anunciando que se apelaría esa decisión.