A través de un comunicado, el Gobierno de Chile condenó un presunto ataque con gases neurotóxicos ocurrido el día miércoles contra la población civil en una zona rebelde en las afueras de Damasco, capital de Siria, provocando una muerte de más de 1.300 víctimas, muchas de ellas niños, mujeres y ancianos.
Desde que comenzó el conflicto en Siria, nuestro país ha manifestado de forma reiterada, un rechazo total hacia el uso de violencia, sin hacer diferencias en el origen de esta, por lo que se insiste en la necesidad de mantener un diálogo político de carácter inclusivo, para así obtener una pronta solución a la crisis que vive Siria, de acuerdo a lo señalado en el documento.
Hasta la fecha más de 100.000 personas han muerto, según datos de la ONU, desde marzo de 2011, cuando se inició una revuelta contra el régimen de Bashar Al Asad, convertida ahora en sangrienta guerra civil.
Refiriéndose a las denuncias que se han recibido sobre un posible de uso de armas químicas en dichos ataques, desde el Gobierno instan a la República Árabe de Siria a otorgar el más amplio y libre acceso a la zona de los ataques a la Comisión de Expertos de Naciones Unidas que se encuentra actualmente en ese país, con el fin que dicha Comisión pueda examinar los cuerpos de las víctimas, determinar su causa de muerte y efectuar todas las diligencias e investigaciones que conduzcan a esclarecer esta masacre.
Cabe recordar que el ataque se produjo en momentos en que expertos de la ONU se encuentran desde el domingo en Siria, precisamente para investigar las acusaciones de ataques con armas químicas que se lanzan los dos bandos.