Dirigentas de organizaciones de mujeres rurales indígenas llegaron hasta Temuco para entrevistarse con los senadores de La Araucanía y pedirles que rechacen la aprobación de la Ley de Obtentores Vegetales que se votará próximamente en el Congreso.
Eliana Catalán Lincoleo, integrante de la asociación indígena regional Weichafe Domo, señaló que en La Araucanía sus habitantes ignoran los pormenores de la ley, indicando que es necesario defender las semillas para los seres humanos.
Millaray Painemal, coordinadora del área indígena Ana-Muri, señaló que la organización que representa está contra el proyecto de ley que implementa la adhesión de Chile al convenio de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales de 1991 (UPOV-91).
A juicio de organizaciones ambientalistas, la normativa conocida como “Ley Monsanto” -por la empresa internacional que produce semillas genéticamente modificadas- traerá graves e irreversibles consecuencias para la agricultura chilena. La directora de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales Indígenas, Francisca Rodríguez, aseguró que este escenario generaría un desequilibrio entre los derechos de los agricultores y los derechos de los mejoradores.
El convenio ratificado por Chile tras la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, en vigencia desde enero de 2004, lo obliga a incorporarse a la versión de 1991 del UPOV. El proyecto será revisado en los próximos días por el Senado y las organizaciones ya alistan manifestaciones para expresar su rechazo.