Los dos sacerdotes secuestrados el pasado mes de abril cerca de Alepo, en el norte de Siria, no están en Turquía, como lo afirmaron algunos medios internacionales, indicó el martes un diplomático turco a la AFP.
“Estos religiosos no se encuentran en el territorio turco”, precisó esta fuente, que pidió el anonimato y rechazó las informaciones publicadas por algunos diarios, en particular árabes, según las cuales los dos hombres estarían detenidos por grupos asociados al Consejo Nacional Sirio (CNS, oposición siria) y los Hermanos Musulmanes.
“Estas informaciones sobre los prelados de los que deseamos la liberación no tienen nada que ver con la realidad”, añadió esta fuente.
Los dos prelados, Yohanna Ibrahum, jefa de la diócesis siria ortodoxa de Alepo, y Boulos Yaziji, jefe de la diócesis griega ortodoxa de la ciudad, fueron secuestrados a finales de abril en Kafar Dael, cerca de Alepo.
No se formuló ninguna reivindicación por este secuestro, pero fuentes de la Iglesia griega ortodoxa, al igual que el régimen sirio, afirmaron que los secuestradores eran “yihadistas chechenos”, activos en algunas redes islamistas en Turquía.
La prensa turca informó recientemente de detenciones en el centro de Turquía entre estos yihadistas sospechosos de estar implicados en el secuestro, unas informaciones que no pudieron ser confirmadas por fuentes oficiales.
Turquía apoya a los rebeldes en el conflicto sirio.