El Grupo de Política Monetaria (GPM) aconsejó mantener la tasa de política monetaria al 5% puesto que en el último mes la desaceleración ha sido menor a la esperada, el consumo sigue registrando un alto dinamismo, la tasa de desempleo se ha reducido en el margen y las expectativas de inflación se mantienen ancladas en el plazo relevante.
Por otra parte, el GPM agregó que, por razones principalmente cambiarias, la inflación ha seguido su tendencia al alza y que a esto se suma una situación internacional que, en el margen, evidencia una mejoría en su desempeño económico.
Frente a un contexto de proyecciones de crecimiento por debajo del tendencial, el GPM consideró inconveniente modificar ahora la TPM.
En este sentido, el economista Rodrigo Fuentes recalcó que “en las últimas reuniones se esperaba una mayor desaceleración del crecimiento de la economía chilena, que debía evidenciarse en el crecimiento, el consumo y el mercado laboral”. Sin embargo, Fuentes enfatizó que “las últimas noticias con respecto a cada una de estas variables hacen pensar que la desaceleración no ha sido la esperada, incluso hay elementos que hacen pensar que ésta tardaría en llegar un poco más de lo proyectado”.
Por su parte, el economista Gonzalo Sanhueza explicó que “actualmente hay un escenario en que los riesgos de bajar la tasa de interés no son tan altos pero, en el margen la desaceleración, lo que uno esperaba ha sido menor”.
Asimismo, Tomás Izquierdo añadió que “ha habido una sorpresa, la desaceleración ha sido más moderada de lo que esperábamos tiempo atrás y en el margen aparecen algunos buenas noticias que no sabemos cuanto tiempo se van a mantener en el tiempo, mejores señales en la actividad de China, repunte importante en el peso del cobre que le resta presión a la cuenta corrientes, se mantiene un mercado laboral muy pujante, etc.”.
Preguntado acerca de que el consumo se haya mantenido alto, Izquierdo señaló que “es sorprendente, sin embargo, detrás de ese consumo fuerte hay un mercado laboral que sigue siendo muy favorable y una masa salarial que sigue creciendo muy fuerte, a pesar de la desaceleración en las colocaciones”.
“Se ha prolongado el dinamismo en la economía más allá de lo que se esperaba y uno esperaría que cuando hay retención en las inversiones, el mercado laboral se afectase, pero todavía no se ve ningún efecto negativo en el marcado laboral (…), hay desaceleración pero más lenta de lo que uno esperaba”, dijo Izquierdo.
En cuanto a las perspectivas de crecimiento de la economía, Rodrigo Fuentes precisó que éstas “giran en torno al 4 y 4,5%, y las expectativas son que en los próximos 3 meses uno debiera ver un cambio en la tasa política monetaria, un cambio a la baja”.