El ministro de Defensa, Rodrigo Hinzpeter, solicitó al Sexto Tribunal Oral en lo Penal declarar en su despacho en el juicio oral contra de ocho gendarmes, acusados por su responsabilidad en la muerte de 81 reos en el incendio en la torre 5 de la cárcel de San Miguel el 8 de diciembre de 2010.
El personero se acogió a su derecho de fijar el lugar donde declarar, tal como ocurrió en el caso Bombas, a solicitud del defensor del ex jefe del Servicio Nocturno de la Guardia Interna José Hormazábal, Pedro Narváez, quien ofrecerá el testimonio del otrora jefe de gabinete como parte de su prueba.
Los tres magistrados que encabezan este juicio resolvieron que pedirán a Hinzpeter que informe si existen o no las condiciones en dicho lugar, para llevar a cabo la diligencia.
Además, los jueces no están obligados a aceptar el requerimiento de Hinzpeter, ya que por ley, también podrían decidir por unanimidad que el secretario de Estado atestigüe en el estrado.
Según detalló Narváez, “en junio el ministro mandó un oficio informando que para los efectos de su declaración iba a hacer uso a la facultad que le otorga la ley y que nos esperaba mañana a las 14:00 horas en su oficina”, enfatizando que Hinzpeter “propuso esta fecha sin saber cómo iba a funcionar el tribunal”.
Por lo anterior, la modalidad en que declarará el titular de Defensa quedará condicionado a lo que estime conveniente el tribunal una vez que el Ministerio Público haya rendido la totalidad de su prueba, que se presume, se realizará en un periodo de al menos tres meses.