Un nuevo tipo de bisturí “inteligente”, capaz de diferenciar un tejido sano de uno canceroso, permitirá una mayor eficiencia en la eliminación quirúrgica de estos tumores, indicó un estudio publicado el miércoles en Estados Unidos.
El llamado iKnife utiliza una pequeña corriente eléctrica que genera un poco de vapor mientras corta el tejido. Este vapor es analizado y el instrumento puede determinar si el tejido cortado es sano o canceroso.
Pruebas en 91 pacientes mostraron que el “diagnóstico del iKnife es particularmente preciso” y “lo suficientemente confiable para un uso generalizado en el quirófano”, señaló el estudio estadounidense aparecido en la revista Science Translational Medicine.
El iKnife utiliza un espectrómetro de masa para analizar el vapor que escapa del tejido cortado, e informar al cirujano en tres segundos sobre la naturaleza del material que está cortando.
Las técnicas actuales, con las cuales una muestra de tejido es enviado a un laboratorio para su análisis, son “caras y muchas veces insuficientes”. Además, llevan entre 20 y 30 minutos, destacaron los investigadores húngaros y británicos que participaron en la investigación.
Las deficiencias tecnológicas actuales hacen que muchas veces los pacientes deban someterse a varias cirugías, explicaron.
El iKnife “puede mejorar el diagnóstico de tumores y puede influir en la toma de decisiones durante la operación, para mejorar en última instancia los resultados en oncología”, agregaron los autores del estudio.
En Gran Bretaña, se diagnostican alrededor de 300.000 casos nuevos de cáncer cada año, lo que requiere 1,8 millones de cirugías de acuerdo con el artículo.
Stephanie Bernik, jefa de cirugía oncológica del Hospital Lenox Hill en Nueva York, consideró “impresionante” el estudio.
“Esto podría ayudar a los cirujanos y a los pacientes a evitar muchas cirugías”, señaló. “Se debe probar esta herramienta a una escala más grande, pero los primeros resultados son muy interesantes”.
En espera de nuevas pruebas, el iKnife aún no está a la venta y no se presume que sea comercializado hasta dentro de un año.