Sin duda en los últimos años el mercado del sushi ha entrado con fuerza en nuestro país, aumentando cada vez más su demanda y deleitando los paladares de miles de chilenos que gozan con este manjar japonés.

Pese a la popularidad de este producto en tierras nacionales, hay quienes siendo originarios del país oriental -y, por ende, conocedores de la cultura gastronómica del sushi- lamentan ciertos “horrores” que cometen los locales chilenos a la hora de prepararlo, servirlo e incluso presentarlo.

Ese es el caso de Akira Uchimura, un bloguero mitad japonés y mitad chileno difusor de la cultura japonesa y fundador de la red mundial de jóvenes Nikkei, quien enlistó en una entrada del sitio web Hana.bi los 7 pecados capitales de los restaurantes de sushi en nuestro país, los que a su juicio dañan la imagen de dicha comida y la experiencia de los consumidores.

A continuación, te los presentamos en detalle.

1.- Que el aire huela a pescado.

Los pescados representan uno de los rellenos más populares del sushi. Pero Chile es un país que se ha dado licencias para experimentar en este punto, agregándole palta y queso crema a esta comida: algo que “es un shock para un japonés amante del sushi tradicional”.

Pero si por la importancia de este ingrediente piensas que un restaurante de sushi debe oler a pescado, “Estás totalmente equivocado”, criticó el japonés-chileno.

“Que el local no tenga olor a sushi demuestra que el sushi está totalmente fresco, y así debería ser (…) Les garantizo que si el local huele a pescado, el sushi no estará bueno”, concluyó.

2.- No respetar el ingrediente primordial del sushi: el arroz.

Para los verdaderos amantes del sushi, uno de los puntos a fijarse a la hora de determinar si un producto es bueno o no es la forma en que está preparado el arroz, ingrediente principal de esta comida.

Al respecto, Uchimura afirma que muchos cocineros cometen el error de apretar demasiado este ingrediente a la hora de hacer un roll, convirtiéndolo en “una masa pegajosa y dura, que es mala para la digestión”.

Ante ello, señaló que “El arroz tiene que ser apretado suavemente, y cada granito no puede perder su forma. Tampoco debe estar seco, y tampoco muy sazonado”.

3.- Tener en el menú platos que no tienen “ni la J de japonés”.

La comida japonesa es muy surtida. Entre algunos de sus platos, además del sushi, se encuentran las populares gyozas o los onigiri. No obstante, la tónica de muchos “locales de comida japonesa” es ofrecer otros platos que de nipones no tienen mucho.

Así lo confesó Uchimura, quien dijo que incluso cadenas de sushi reconocidas venden platos como el Pad Thai que, en realidad, es de origen tailandés.

Lo anterior ocurre, según el bloguero, porque muchos restaurantes japoneses de Chile y el extranjero “quieren aumentar la cantidad de platos que ofrecen con algo más exótico, y se van con una volada así, ofreciendo un plato tailandés o de otro país asiático”.

Yaroslav Yaroslavov (SXC)

Yaroslav Yaroslavov (SXC)

4.- Servir los postres en bandejas destinadas al sushi.

Existen locales a nivel nacional que presentan los cortes en unas bandejas llamadas Geta, hechas principalmente de madera de bambú.

Pero el error, a juicio de Akira, se produce cuando se utilizan estas bandejas para servir el postre.

Una Geta “está especialmente hecha para que se pueda comer el sushi en una forma más fácil y elegante, pero al hacerlo con pasteles a veces puede quedar la crema”, sostuvo.

5.- No ofrecer pañitos para limpiarse las manos.

El oshibori, también llamado otefuki, es una toalla de mano -húmeda, fría o caliente- que se ofrece en un salón de té o restaurante en Japón. Éste se utiliza para limpiarse las manos antes de comer, y por mucho tiempo ha sido considerado como un elemento tradicional en dicho país.

Pese a la importancia que tiene en el mundo gastronómico nipón, uno de los errores de los recintos de sushi en Chile es que no suelen ofrecer este pañito.

El sushi “Es un plato que en realidad se come con la mano, por eso que se deben usar oshibori o pañitos mojados con agua tibia para higienizar las manos”, indicó.

6.- Que el jengibre esté pasado.

El gari, más conocido como jengibre encurtido o rosado, es uno de los elementos básicos que se consideran al comer sushi, junto al wasabi y hashi (palillos de madera).

De hecho, este tipo de jengibre tiene una labor importante a la hora de saborear dicho plato japonés: es el ingrediente que limpia el paladar de sabores entre bocado y bocado.

Pese a ello, en palabras de Akira “Muchos restaurantes tienen el jengibre guardado por mucho tiempo, o mal guardado, que poco a poco comienza a tener un sabor agrio. En vez de mejorarte el sabor del sushi, te lo empeora”.

7.- Que el local no tenga un nombre bien pensado.

Según Urichuma, caen en este pecado los nombres considerados “genéricos” como aquellos que mezclan “sakura”, “samurai”, “fujiyama” con otra palabra en español. Para él, quienes instalan un local de sushi debieran estudiar un poco más el nombre para ponerle uno “con más significado”.

Pese a que los nombres genéricos pueden resultar poco atractivos, aquellos inapropiados son inaceptables.

Ese fue el caso del anteriormente llamado “Restaurante Fukushima Atomic Sushi Bar” de Viña del Mar, citado por el bloguero, cuyo nombre fue cambiado tras las peticiones de un grupo de japoneses.

“No sólo es ofensivo por burlarse de la crisis que todavía está peleando Japón hoy en día, sino que también se nota que trataron de aprovecharse de este hecho para subir el conocimiento de su local, ya que lo abrieron tan sólo meses después del 3.11. No puede haber tanta ignorancia e insensatez para ponerle tal nombre”, afirmó Uchimura.