Unos 242 manifestantes fueron detenidos, 70 de los cuales “fueron torturados”, y un centenar de empleados públicos sufrieron hostigamientos esta semana en Venezuela, durante las protestas contra el gobierno chavista, denunció el sábado una diputada opositora.
Los manifestantes fueron detenidos por delitos, entre otros, de “porte ilícito de cacerolas (…), agavillamiento (asociación ilícita), rebelión, obstrucción a la vía pública y terrorismo”, denunció la diputada Delsa Solórzano, de la coalición opositora, en conferencia de prensa.
“Nosotros no sabíamos que tener una cacerola y una cuchara es terrorismo”, dijo la diputada, enumerando 91 detenciones en Carabobo (noroeste) “incluyendo a menores de edad”, 44 en Barinas (oeste), 70 en Lara (noroeste), 35 en Monagas (noreste) y dos en Sucre (noreste), la mayoría de los cuales fueron liberados poco después.
Los detenidos de Lara “fueron torturados”, dijo la dirigente opositora. “Los obligaron a ponerse gorras y a cantar consignas (…) y si no lo hacían eran golpeados”, afirmó.
Solórzano también aseguró haber recibido “un centenar” de denuncias “de empleados públicos que han sido acosados, amenazados o despedidos de sus cargos por razones políticas”.
“Estos hechos están ocurriendo desde el mismo lunes 15 de abril (un día después de las elecciones), momento en el cual se anunció la operación limpieza, a través de la cual iban a destituir a todos los funcionarios públicos sobre los cuales pesara alguna sospecha de no haber sufragado por Nicolás Maduro”, dijo.
Luego de que el candidato opositor Henrique Capriles desconociera la victoria de Maduro -el delfín de Hugo Chávez- por un margen 1,8%, los venezolanos se volcaron a protestar cada noche a través de “caceroleadas” desde sus casas.
Esta semana, Maduro anunció que no permitiría una marcha convocada para el miércoles por Capriles en Caracas argumentando riesgos para la seguridad, luego de que protestas el lunes dejaran ocho muertos y más de 60 heridos, según cifras oficiales.
El gobierno responsabilizó a la oposición por las víctimas del inflamable clima político venezolano y anunció que tomará medidas judiciales.