Pese a las celebraciones registradas días atrás por la paralización del proyecto de Pascua Lama, comunidades diaguitas plantean suspicacias respecto al futuro de la acción legal y del futuro del mega proyecto.
De visita en Osorno, en medio de una gira nacional, Rodrigo Villablanca Páez, vocero de la comunidad diaguita Sierra Huachacan de Copiapó, reclamó que lo que realmente exigen es que se revoque el permiso de resolución de calificación ambiental a Barrick Gold, debido a que estaría vulnerando una serie de normas ambientales, sobre todo por la destrucción de glaciares, contaminación de los ríos.
De hecho, Villablanca lanzó sus dardos contra el abogado que presentó, en representación de cinco comunidades diaguitas, el recurso de no innovar que acogió la Corte de Apelaciones de Copiapó y que paralizó el proyecto minero Binacional.
Según Villablanca, la acción legal provocó incluso la división de las comunidades indígenas.
De acuerdo al dirigente indígena, el modelo de negociación social, política y económica es el mismo que se utiliza en otras partes del país donde se emplazan mega proyectos económicos, como en Pilmaiquen y la inundación del Centro Ceremonial Kintuante. Modelo que involucraría actores políticos y poderes económicos.
La desconfiaba de las comunidades indígenas, dijo Villablanca, tiene que ver con que una serie de otras iniciativas legales se han presentando en la justicia, así como en instituciones gubernamentales y medio ambientales, las cuales finalmente no le han puesto un cese definitivo a Pascua Lama.