Comunidades indígenas diaguitas de la pre cordillera del Valle del Huasco, se mostraron conformes con la decisión de la Corte de Apelaciones de Copiapó de paralizar todas las obras de la empresa Barrick en Pascua Lama, hasta que se resuelva el fondo de la acusación que persigue revocar el permiso ambiental al proyecto, por daño ambiental.
En fallo unánime, el tribunal de alzada acogió una orden de no innovar planteada por el abogado Lorenzo Soto, quien representa a un grupo de comunidades indígenas, para detener el proyecto por supuestos incumplimientos en las exigencias contenidas en la Resolución de Calificación Ambiental que aprobó la iniciativa.
Al respecto, Solange Bordones, presidenta del consejo regional diaguita y representante de las 7 comunidades que presentaron la acción judicial, indicó que el recurso buscaba asegurar el recurso hídrico para la cuenca, pues es imprescindible para su forma de vida.
Bordones agregó, que ella ha expuesta las situaciones denunciadas en la Comisión de Medio Ambiente del Congreso, instancia que “quedó de sesionar en Alto del Carmen, sin embargo, nunca se hizo. De ahí que nuestra única alternativa fuera la salida judicial”.
Además narró los hechos concretos que llevó a sus comunidades a buscar la paralización del proyecto.
Por su parte, el abogado representante de los diaguitas, Lorenzo Soto, explicó que esta acción se fundamenta en la serie de transgresiones que se han realizado al proyecto, sobre las cuales “la autoridad no ha actuado”, y que los ha obligado a los recursos.
El jurista sostuvo que ha diferencia de la paralización parcial administrativa de faenas de Pascua Lama realizada por Sernageomin en octubre del 2012, por no cumplir la normativa de seguridad minera, este recurso paraliza integralmente el proyecto por las múltiples irregularidades detectadas.
Recordemos que el último mes Barrick ha sufrido por Pascua Lama tres sanciones del Servicio de Evaluación Ambiental de Atacama, cargos por no cumplimientos ambientales de la Superintendencia de Medio Ambiente.