Empezando abril, el panorama político se vuelve más honesto, o menos especulativo, en cuanto a candidatos refiere. Salvo sorpresas de último momento, ya están todos los aspirantes a la presidencia definidos, unos con sus programas estructurados y otros esperando a que se los arme “la ciudadanía”. Algo que de por sí puede ser extraño; por lo menos para mí.
Respecto de los programas, los temas a contener y debatir debiesen estar claros: en las presidenciales tenemos que hablar de la Constitución, del futuro de la educación, de los pueblos originarios, de diversidad sexual, de la descentralización y del medio ambiente.
Es necesario hablar de estas ideas porque a partir del despliegue de estos conceptos es que han surgido “externalidades” sociales y desigualdades que ya no pueden ser pasadas por alto. Basta recordar como hace un tiempo, pescadores artesanales y estudiantes señalaban a políticos oficialistas y de oposición lo que tenían que resguardar, cautelar y promover para representar los intereses sociales de un país diferente.
A partir de episodios como esos, hay que ser responsables y revisar las propuestas de gobierno que se ofrecen centrándonos medio ambiente y pueblos originarios, pues seguirán siendo materia de interés ciudadano para el próximo periodo presidencial.
Quienes tienen la tarea más avanzada son Golborne, Gómez, Jocelyn –Holt, MEO, Orrego y Velasco. Parisi está construyendo su programa de gobierno. El candidato de RN tiene un archivo PDF donde habla de la idea de Chile que tiene. En este documento no se mencionan áreas ni proyectos específicos, se habla de un diagnóstico general del país y sobre lo que el candidato entiende por Capacidad, Justicia y Comunidad.
Respecto de la ex presidenta, ésta aún no estructura su programa de gobierno por lo que es mejor pasar.
Para el caso del candidato Golborne, dentro del segundo eje programático “Calidad de vida y condiciones para la felicidad” dedica un párrafo a hablar de Medio Ambiente. Lo titula: “Cuidemos el medio ambiente”, léalo y saque sus propias conclusiones. Más adelante, en su tercer eje “Crecimiento, innovación y productividad”, el candidato refiere a Chile país minero, energía, competitividad agrícola, pesca y acuicultura, todo con la misma mirada que se ha venido haciendo desde los gobiernos de la Concertación, es decir, una lógica economicista cubierta de buenas intenciones en donde se plantea que hay que perfeccionar y profundizar las herramientas ya existentes.
Sobre pueblos originarios, habla sobre lo necesario de generar confianza, diálogo e integración, descansando en la nueva institucionalidad indígena que se está creando. El candidato olvidó apuntar su idea de las balas.
El candidato Gómez tiene un área denominada Chile Verde. Aquí hay una propuesta ambiental y una energética. En la ambiental dispone dos dimensiones de trabajo: Sustentabilidad ambiental y Evaluación y planificación de proyectos. En la primera dimensión, apunta a fusionar las carteras de medio ambiente y energía para dar vida al Ministerio de Sustentabilidad Ambiental, Energía e Innovación. También pretende crear el Ministerio de Agricultura y Biodiversidad. En ámbitos de evaluación y planificación de proyectos, pretende generar una nueva institucionalidad denominada “Unidad de Evaluación y Planificación Social de Proyectos” haciendo exigible la Evaluación Ambiental Estratégica modificando la Ley de Participación Ciudadana hacia un carácter vinculante.
En términos de energía, este candidato plantea un nuevo modelo energético, una ley de eficiencia energética y la activa promoción de energías renovables.
Sobre temas de pueblos originarios, en el área de Derechos Igualitarios, Gómez plantea en el punto 63 “Chile plurinacional y multicultural”. En este apartado el radical es el único candidato que menciona la importancia de ejecutar el convenio 169. A su vez, también propone armar un Consejo de Pueblos Indígenas como un órgano representativo y con participación en el Congreso. Vea estas propuestas y compare con los otros candidatos.
Respecto de Joyeclyn-Holt, este plantea 4 áreas denominadas “Te quiero”; despenalizado, democrático, mapuche y diverso. Su apartado sobre el pueblo Mapuche llama la atención por la intención de reconocer la identidad, derechos, y la creación de reservas públicas de tierras con propiedad Estado a disposición del pueblo Mapuche. De temas ambientales, poco y nada.
Respecto de MEO, ambientalmente el candidato tiene una línea de propuesta titulada “Energía y Medio Ambiente” (extraña jerarquización). Ahí uno encuentra dos “Propuestas Progresistas”. Una “energética sobre leña” y otra sobre “medio ambiente”. En esta última hay cosas que tienen distintos niveles de profundidad, es decir, hay cosas conceptuales, como crear una política ambiental y hay otras más jugadas y específicas que hablan de derogar el código de aguas vigente y hacerla un bien nacional de uso público. En este plano entran temas como el manejo de cuencas, reciclaje y varias otras ideas que, si usted vive en Chile y le interesa la temática o se ha sentido pasado a llevar por las leyes que dicen “protegerlo”, puede que tenga alta sintonía con ellas. Vaya a leerlas, vea su nivel de consistencia y saque sus conclusiones.
Sobre pueblos originarios, al candidato del Pro sólo se le conocen grandes declaraciones, ya que en su sitio web no se aprecian propuestas en esta materia.
El candidato de la DC habla de ideas programáticas y se atreve a apostar por energía y desarrollo limpio y sustentable. En esta línea propone la creación de una política energética, eliminar a 30 años plazo la energía generada con combustible fósil e incentivar una política de ahorro energético. Sobre pueblos originarios, este candidato plantea en su sección de “sociedad con derechos y obligaciones claros” la idea que Chile se debe reconocer como un Estado Plurinacional por cuanto esto significaría una oportunidad de integración y desarrollo para todos.
Por último, el candidato Velasco dice que va por energías más limpias y menos caras. Además asegura que va por “un crecimiento más verde” en donde plantea hacer más sustentable el uso del agua, energía, minería y otros recursos escasos usando aparatos normativos de mayor exigencia. Lo anterior debe ir combinado con un mejor ordenamiento territorial, respetando las preocupaciones de la comunidad. En materia de pueblos originarios, el candidato plantea una fiscalía antidiscriminación donde podrá ser resguardado todo aquel que se vista o piense distinto. Nuevamente, lo invito a ir al texto a revisar los planteamientos.
Seguramente, si ya llegó hasta aquí, habrá caído en cuenta que nuestros candidatos tienen propuestas extrañas, a veces descompensadas y claramente asimétricas. Hay elementos generales y superficiales y también planteamientos específicos y radicales. Falta avanzar y redondear mejor las ideas, aterrizarlas y entregar claridad. Quedan poco más de dos meses para las primarias y hay quienes aún no entregan posturas y maneras de conducir estos temas.
Por último, (salvo un caso) es preocupante la falta de relación que establecen los candidatos entre los recursos naturales y los pueblos originarios. ¿Será necesario recordarles que es ahí donde se genera parte importante de la riqueza de Chile, que es en territorios indígenas donde se invierte fuerte por el desarrollo nacional? Parece que sí.
Juan Pablo Gándara
Sociólogo de la Universidad Diego Portales. Se ha desempeñado elaborando diversos estudios socioambientales, principalmente diagnósticos y caracterizaciones territoriales, procesos de participación ciudadana, elaboración de líneas base y construcción y gestión de políticas de RSE, vinculadas a resolución y prevención de conflictos socioambientales. Actualmente director de proyectos en Fundación Casa de la Paz.