Al menos 42 personas murieron y decenas resultaron heridas en un incendio en un campo de refugiados birmanos situado en el norte de Tailandia, según un nuevo balance.
“El último balance que hemos podido confirmar por talkie-walkie es de 42 muertos”, indicó Narumol Paravat, gobernador de la provincia de Mae Hong Son, y añadió que se puede agravar a medidas que las autoridades vayan descubriendo la magnitud de los daños.
Un responsable dijo con anterioridad que la mayoría de los muertos eran mujeres, personas mayores y niños. “Unas 200 personas resultaron heridas”, añadió. Un centenar de tiendas fueron destruidas.
El incendio se declaró la tarde del viernes en el campo de Mae Surin, que acoge a cerca de 4.000 refugiados en la provincia de Mae Hong Son, y pudo ser controlado al cabo de dos horas, según una responsable del ministerio del Interior.
En Tailandia existen una decena de campos de refugiados instalados a lo largo de la frontera con Birmania.
Estos campos, en teoría temporales, fueron creados a mediados de los años 1980 y en febrero acogían a unas 130.000 personas, de las cuales unas 80.000 tienen el estatus oficial de refugiados, según el Thailand Burma Border Consortium (TBBC), red de ONG que se ocupa de estos campos.
La gran mayoría de estos refugiados pertenecen a la minoría étnica karen.