En julio podrían rematarse 75 vehículos, abandonados en el corralón municipal y que, tras diversos procesos judiciales, no registran dueño que los haya reclamado.
Las últimas gestiones para visar esa decisión, las realiza la dirección jurídica del municipio penquista, que deberá agilizar la determinación a partir del colapso del corralón municipal, ubicado en el sector de Los Lirios en Collao.
El jefe de gabinete del municipio penquista, Humberto Toro, dio cuenta del proceso que deberá respetar tres últimos llamados públicos a eventuales reclamantes (el primero en abril, posteriormente mayo y junio), para el mes siguiente proceder al remate; cuyo dinero recaudado ingresará a las arcas municipales.
Los autos abandonados, que superan los 200 en el corralón penquista, provienen de choques donde nadie posteriormente los reclama, ni siquiera en procesos judiciales y también abandono por meses en las calles de Concepción, cuyos mismos vecinos denuncian a la autoridad.