Un nuevo llamado al Ejecutivo y a los parlamentarios hizo la Corte de Apelaciones de Concepción para nombrar más jueces laborales en la zona, ante la carga laboral del único juzgado que dejó la reforma en esa materia. El vocero del tribunal, Diego Simpértigue, indicó que hoy es más urgente que nunca esa necesidad.
El emplazamiento lo hizo el ex presidente de la corte penquista durante la cuenta sobre lo que fue su gestión, la que concluyó la semana pasada cuando entregó el cargo al ministro Juan Rubilar.
Al destacar el trabajo de las seis salas del tribunal de alzada, con las causas al día en lo que se refiere a su tramitación, así como del personal administrativo, Simpértigue enumeró algunas de las falencias y una de ellas es la falta de más magistrados en el Juzgado Laboral.
La reforma de la justicia del trabajo eliminó los jueces de Talcahuano y dejó tres en Concepción, al igual que en Chillán y dos menos que Temuco, donde el juzgado tiene una carga muy por debajo de la que registra el tribunal penquista.
Sobre la solicitud de la Corte de Apelaciones, ignorada desde hace más de tres años, el diputado José Miguel Ortiz se comprometió a reiterarla, aunque aseguró que el gobierno sabe de la necesidad.
Una propuesta más que demanda, fue la que hizo Simpértigue para que el Tribunal Oral de Cañete -subutilizado por el bajo ingreso de casos- sea dividido, de manera que una sala se traslade a Coronel y realice ahí juicios que hoy se realizan en el recargado juzgado oral penquista.
En la cuenta pública de la Corte de Concepción estaba presente el subsecretario de Justicia, Juan Ignacio Piña, quien dijo que analizaría los planteamientos expresados, aunque sin comprometer nada concreto, igual como lo han hecho sus antecesores, no sólo de esta administración sino también del gobierno anterior.