Los empresarios propietarios de Buses Casther, Expreso Caldera y Buses Caldera, habrían amenazado con el despido de trabajadores luego que la ex alcaldesa Brunilda González, junto a un grupo de vecinos, les solicitara la disminución de las frecuencias de salida de los buses.
Las empresas de buses mencionadas, habrían ejecutado un acuerdo para fijar los precios de venta de pasajes de los buses que unen Copiapó con Caldera, lo que generó una fuerte alza en los precios de estos, sustentada según los transportistas, en la alta frecuencia de viajes que deben realizar.
Ante este argumento, Brunilda González intentó dialogar con los empresarios, solicitando la disminución de frecuencias de los viajes, para así bajar los precios de los pasajes, sin embargo, los dueños de los buses le señalaron que si eso ocurría, se producirían despidos de choferes y funcionarios de las empresas.
Luego de esta situación, la ex alcaldesa, junto a los vecinos, iniciaron un proceso formal en el Sernac, denunciando esta situación.
En relación al requerimiento, Miguel Vargas, director del Sernac, indicó que ésta fue una investigación de casi dos años por parte de la Fiscalía, donde las pruebas determinaron que había acuerdos.
A partir de ahora, el tribunal deberá realizar la investigación y definir si la sentencia debe ser ejecutada.
Contactados el Gerente de Buses Casther, Héctor Arriagada, y el representante legal de Expreso Caldera, declinaron dar declaraciones, indicando que aún no han sido notificados.