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Desde Santiago, Helen Moya Vidal nos envía esta imagen y la siguiente descripción:
Sucede que este lunes 11 de marzo en la sala de ventas del Supermercado Mayorista 10 de calle 21 de Mayo en Santiago, aparecían unos letreros anunciando más de 150 productos que estarían en ‘venta de bodega a precios increíbles’, lo cual sería los días 12 y 13 del presente.
Decidimos ver unos precios ese mismo día para volver al día siguiente y comprobar las ofertas. Este martes 12, sucede que no había ningún cambio en nada y al momento de solicitar información sobre los productos de la ‘liquidación’, nadie sabía nada, ni cuáles eran los productos en cuestión. Solicitamos hablar con el supervisor o encargado del local.
Llegó una persona que nos dijo que no podían dar volantes de los productos en oferta porque después la gente los tiraba en la calle y les pasaban un parte municipal.
Debido a lo anterior, le hago ver que al menos podrían estar bien señalizados los productos y esta vez la excusa fue: ‘Es que la persona que pone los precios no está, por lo cual lo vamos a desvincular de la empresa’.
Acto seguido, le pido que me muestre las ofertas de todas formas, para lo cual me pasó un listado de productos (el cual tuve que esperar varios minutos a que imprimieran) que tenían los valores igual a un día sin ofertas e incluso varios de ellos más caros de lo habitual.
Es decir, la anunciada venta de bodega con 150 productos en oferta no era tal, no había claridad en los precios y a todas luces se engañaba a la gente.
La persona que me daba explicaciones aduciendo que de la casa matriz venían los precios, me dijo que él era sólo el encargado de sala, por lo que solicité después de 20 minutos de burdas explicaciones hablar con el administrador.
Sus respuesta poco mejoraron y exigí sacar los letreros que anunciaban algo que no existía. “Cuando llegue el niño de los letreros los vamos a sacar”, fue su respuesta.
Queda claro que no había ofertas, menos una explicación razonable, que los productos estaban mal etiquetados y finalmente una publicidad engañosa, muy engañosa.
Al final, compramos algunos productos y el dorso de la boleta dice Unimarc, por lo que supongo que el mencionado supermercado mayorista, pertenece a esa cadena.
Esperamos junto a mi marido largos minutos a que se sacaran los anuncios de la ‘gran venta de bodega’ lo cual nunca ocurrió. Me imagino no sucederá lo mismo en otras sucursales ¿o si?
Helen Moya Vidal
