La empresa Lácteos Valdivia informó a trabajadores que la planta fue vendida a empresa Watts y cerrará en abril del otro año. La decisión daña a 180 trabajadores y a gran parte de productores lecheros de la zona.
La información fue proporcionada por fuentes de La Radio y confirmada por al Central Unitaria de Trabajadores en Valdivia.
La decisión fue comunicada a quienes trabajan en la planta que está en el sector Cayumapu, camino a Máfil, informándoles de que la venta de Lácteos Valdivia a Watts ya era un hecho, y que la planta se cerraba en el mes de abril. Así lo confirmó Lucía Vega, presidenta de la multigremial en la zona.
Con esto se oficializa una seguidilla de rumores que apuntaban al cierre de la planta, donde –según la CUT- se reubicaría a un 50% de los trabajadores que acepten la oferta de Watts, debiendo analizarse el fin de los contratos y el pago de finiquitos, además de sopesar de si las condiciones que entregará la nueva empresa son convenientes o no.
Para Vega la situación es preocupante porque en esa planta trabaja mucha gente que vive en el sector Cayumapu y que dejaría sin sustento a sus familias. Además, porque esta decisión evidencia que la región de Los Ríos pierde otra empresa grande y tradicional de la zona.
La noticia también afecta negativamente al sector lácteo en la zona. El director ejecutivo de la Asociación de Productores de Leche región de Los Ríos, Aproval, José Luis Delgado, indicó que de sus asociados una veintena son proveedores de Lácteos Valdivia, que es un poco más de la mitad de lo que recibe la planta en cuanto a cantidad de leche.
Delgado señaló que siempre es inconveniente que se concentre el mercado, porque provoca un efecto dominó que en este caso daña a sus asociados.
El representante de Aproval señaló que la próxima semana habría una reunión entre ejecutivos de Watts y proveedores de Lácteos Valdivia, con el fin de responder a una incertidumbre de cómo venderán ahora su leche.
En el caso puntual, Delgado señaló que las empresas lácteas tienen una pauta de pago y Lácteos Valdivia no tiene una propia y toma otras que están en el mercado, las que son ofrecidas a los proveedores, perdiendo un posible diferencial con Watts.
En tanto, la gente lamentó lo ocurrido porque en Villa Cayumapu el 80% de los grupos familiares dependen de la planta, como lo indicó una de sus trabajadoras.
Incluso, la mujer aseguró que Watts les ofreció una canasta familiar por tres meses después del finiquito por 25 mil pesos, y 45 cupos de trabajo en Osorno –donde está la empresa- lo cual a priori no sería aceptado.
Hasta el lugar concurrió el seremi del Trabajo, Jorge Mendes, junto al subsecretario de la cartera, Bruno Baranda, quienes tomaron la inquietud de los trabajadores y comprometieron apoyarlos con herramientas que tienen en el Ministerio. De momento, ya se mandató al titular en la zona a que recabe mayores antecedentes para continuar con la acción de apoyo.
Los afectados agradecieron lo anterior, esperando de que el Gobierno cumpla. Al respecto, el diputado socialista Alfonso de Urresti emplazó a dichas autoridades a no dar la espalda a los trabajadores, criticando a la empresa por esta forma de actuar, en cuanto a que compra una planta –emblemática en la zona- para luego cerrarla y dejar a cientos de familias sin sustento económico.