Los padres estadounidenses siguen de cerca la actividad de sus hijos adolescentes en Facebook y otras redes sociales, lo que provoca una reacción “mixta” en los jóvenes, según muestra un nuevo estudio publicado este martes.
El informe del proyecto del estilo de vida estadounidenses e internet del Pew Research Center encontró que los padres están vigilando las actividades en línea de sus hijos para confrontar una serie de miedos que van desde interactuar con extraños o que su rastro en línea sea seguido por los anunciantes.
El estudio, llevado a cabo en colaboración con el centro Berkman para internet y la sociedad de la Universidad de Harvard, estimó que el 80% de los padres cuyos hijos adolescentes usan redes sociales son a su vez usuarios de las mismas.
“Algunos jóvenes preferirían no solicitar amistad a sus padres”, dice el estudio. “Lo hacen sólo porque es lo que se espera de ellos”, precisa.
Sin embargo los investigadores hallaron que en otros casos los adolescentes “tienen una actitud positiva acerca de ser amigos con sus padres” en las redes sociales.
Sandra Cortesi del centro Berkman afirmó que los jóvenes tienen “reacciones mixtas acerca de ser amigos de sus padres” en redes sociales como Facebook.
“A algunos adolescentes les gusta ser amigos de sus familiares”, dijo. “Otros prefieren no solicitar amistad a sus padres, pero lo hacen porque es lo que se espera de ellos. Y otros mantienen sus perfiles en secreto o restringen el acceso de sus padres a la información”.
Un 50% de los padres que utilizan redes sociales, comentaron o respondieron directamente a algo que fue publicado en el perfil de su hijo, dijeron los investigadores.
El estudio muestra que los padres vigilan la actividad de sus hijos adolescentes en línea por los miedos persistentes sobre una serie de riesgos.
Mientras que el 53% de los padres dijeron que estaban “muy preocupados” acerca de cómo sus hijos interactúan con gente que no conocen, un 46% se siente de la misma forma acerca de cuantos datos se recolectan por parte de anunciantes en línea que están siguiendo su actividad.
Los padres también se preocupan porque la actividad de sus hijos en las redes sociales puedan dañar la reputación de sus vástagos, y posiblemente perseguirles más tarde en sus vidas.
Así dos tercios de los padres afirman que están preocupados sobre cómo sus hijos gestionan su reputación en línea.
Los investigadores hallaron que el 59% de los padres de los adolescentes que usan redes sociales han hablado con sus hijos porque estaban preocupados sobre algo que éstos publicaron en su cuenta o perfil. Casi cuatro de cada diez les ayudaron a configurar los parámetros de privacidad de una red social y un 50% ha utilizado controles para bloquear, filtrar o vigilar sus actividades en línea.
Un 42% buscaron el nombre de su hijo en internet para ver qué información podían encontrar.
El estudio se basa en una encuesta telefónica a 802 padres y sus 802 hijos adolescentes de entre 12 y 17 años, realizada entre el 26 de julio y el 30 de septiembre.