Si eres de aquellos que le tienen miedo al dentista, y al sonido que emiten sus diferentes instrumentos, deberías pensarlo dos veces antes de que tu familia perciba ese temor.
Lo anterior, ya que un estudio de la Universidad Carlos III de Madrid (España) demostró estadísticamente que el miedo al dentista se transmite de padres a hijos.
Para llegar a este resultado, los expertos a cargo de la investigación estudiaron a 183 niños -de entre 7 y 12 años- y a sus padres, tras lo cual hallaron que los niveles de miedo de progenitores y retoños están correlacionados.
Al respecto, América Lara-Sacido, una de las autoras del estudio, señaló que “junto con la presencia de transmisión emocional del miedo al dentista entre los miembros de la familia, hemos identificado el papel relevante de los padres con respecto a las madres en el contagio de esta fobia”.
En este sentido la investigación, publicada en el International Journal of Paediatric Dentistry, postula que los padres tienen un papel clave en el miedo al dentista que las madres transmiten a sus hijos, ya que ellos actúan como una variable mediadora.
“Aunque los resultados deben tomarse con las debidas cautelas, los niños parecen atender fundamentalmente a las reacciones emocionales de sus padres para decidir si los eventos dentales son potencialmente estresantes”, aseguró Lara-Sacido. Por ello, la transmisión del temor de la madre al niño podría verse influida, tanto para disminuir como para aumentar la ansiedad, por la reacción que el progenitor muestra en el dentista.
Ante estos resultados, los expertos destacaron la necesidad de involucrar tanto a padres como madres en las campañas de prevención del miedo dental, tratando de incluir a los progenitores cuando asistan a la consulta para manifestar ausencia de preocupación.
“De cara a la atención en la clínica odontológica, el trabajo con los padres es fundamental. Que los padres vengan tranquilos es tan interesante como procurar directamente que el niño se relaje”, dijo la autora, agregando que “Por la vía del contagio emocional positivo en la familia se podría llegar a inducir en el niño el estado adecuado que facilite la atención dental”, consignó la agencia de noticias española SINC.