En lo que debería haber sido una de sus últimas sesiones, el Concejo Municipal de Los Ángeles no pudo trabajar debido a la falta de quórum para efectuar la reunión habitual de los lunes, al asistir sólo 4 de los 9 integrantes del cuerpo colegiado.
A la cita llegaron las concejalas Teresa Stark y Myriam Quezada, además de Víctor Salazar y Mario Ríos, quienes no pudieron sesionar por la inasistencia de sus partes. Se trata de la tercera ocasión en estos cuatro años, en que el cuerpo colegiado no puede reunirse por la ausencia de sus integrantes.
Pese al impasse, los concejales igualmente hicieron un corolario de su trabajo en este periodo. Fue el caso de Teresa Stark, quien junto con resaltar el trabajo del concejo, reparó en las diferentes formas de trabajo de los alcaldes Joel Rosales y Eduardo Borgoño.
Por su parte, Myriam Quezada destacó lo realizado, lo cual ha permitido consolidar diversos proyectos que mejoran la calidad de vida.
En tanto, el concejal Mario Ríos destacó que el Concejo Municipal se abocó a sembrar para luego cosechar, pero admitió que proyectos anteriores, como el paseo Colón, afectaron el trabajo de la instancia.
Le quisimos consultar la opinión al alcalde Eduardo Borgoño y a los concejales Aníbal Rivas, Leonet Rosales, Ismael Rioseco y Cristóbal Urruticoechea pero éstos no llegaron a la reunión.
Hasta que asuma el nuevo Concejo Municipal el 6 de diciembre próximo, quedan dos sesiones. La primera está prevista para el 28 de noviembre y la siguiente será el 3 de diciembre.