El Programa de Derechos Humanos solicitó a la Corte de Concepción revocar el sobreseimiento por la desaparición de tres campesinos de Ñuble en 1973 y procesar por secuestro calificado al ex carabinero que habría ordenado las detenciones. Los familiares de detenidos desaparecidos criticaron el escaso avance que ha tenido este tipo de investigaciones en Chillán, acusando a los jueces de velar más por los victimarios que por las víctimas.
A diferencia de los procesamientos y sentencias dictadas por el ministro especial para causas por violación de derechos humanos de Concepción, Carlos Aldana, en Chillán han sido más los reveses en estas investigaciones.
Un ejemplo es el caso por la desaparición de los hermanos Gustavo y Rogelio Domínguez, además de Wilson Becerra, quienes fueron detenidos el 11 de octubre de 1973 por un grupo operativo de la Segunda Comisaría de Carabineros chillaneja.
Ese fue el último día en que los tres fueron vistos con vida, aunque existen testigos de las torturas aplicadas a los campesinos así como que quien estuvo a cargo de los arrestos fue el entonces teniente de Carabineros Patricio Jeldrez Rodríguez.
Todos esos antecedentes están en el expediente que tramitaba el ministro de la Corte chillaneja, Claudio Arias. No obstante, el alto magistrado determinó el cierre del sumario y sobreseyó la causa.
La abogada del programa de DDHH, Patricia Parra, apeló de la resolución ante el tribunal de alzada penquista, pidiendo la reapertura de la investigación y el sometimiento a proceso del ex uniformado. Lo hizo ante la Primera sala de la Corte, cuyos ministros -María Leonor Sanhueza, Eliseo Araya y Cesar Panes- dejaron en acuerdo el fallo.
A la salida de los alegatos, la dirigenta de la agrupaciones de familiares de detenidos desaparecidos, Mercedes Sánchez, dijo que esta era sólo uno de los casos por violación de derechos humanos en los que muy poco o nada se ha avanzado en Chillán.
La decisión de la Corte de Concepción en el caso de los hermanos Domínguez se conocerá la próxima semana.