El portero de la Universidad de Chile, Johnny Herrera, deberá comparacer este mediodía en la Fiscalía local de Quintero, en la Región de Valparaíso, tras ser detenido el pasado lunes 17 de septiembre conduciendo su vehículo en estado de ebriedad.

Los hechos ocurrieron el 17 de septiembre en la madrugada, luego de que el arquero azul saliera de las fondas en Maitencillo, cuando fue fiscalizado por Carabineros, comprobando que tenía 1,06 grados de alcohol por litro de sangre, por lo que fue detenido y llevado al retén del lugar.

En esta jornada, el fiscal Alfredo Keller encabezará las diligencias que en un comienzo se pensó serían de baja condena, pero que con el transcurrir de los días se especula que podría ir desde los dos años de suspensión de licencia de conducir, hasta decreta arraigo nacional, con lo que el golero no podrías estar en la final de vuelta de la Recopa sudamericana ante el Santos, programada para este 26 de septiembre.

Recordar además que el jugador manifestó posteriormente al hecho que sólo estaba tomó ‘un poco, pues estaba celebrando el 18 con unos amigos’. Más tarde, en las afueras del CDA, lugar de entrenamiento de la Universidad de Chile dijo que fue un hecho ‘lamentable’, pero que estaba dispuesto a asumir las consecuencias.

A la vez, Patricio Casassus, el padre de Macarena, la joven que el futbolista Johnny Herrera mató en el año 2009 cuando conducía a más de 120 km/h, manifestó su desazón con los tribunales por permitir que una persona con esos antecedentes tenga la posibilidad de conducir.