Trabajadores del Ministerio de Educación se suman al paro convocado por funcionarios de la Superintendencia de la cartera, llamando a paralizar las actividades a nivel nacional.
Los empleados acusan que esto gatilla en que cerca de siete mil colegios han dejado de ser fiscalizados. Un hecho que el Superintendente de Educación, Manuel Casanueva, niega que sea así.
La Asociación Nacional de Funcionarios del Ministerio de Educación, Andime, determinó sumarse a los 400 trabajadores de la Superintendencia, quienes hace 12 días se encuentran en paralización de actividades.
Esta decisión contó con el apoyo de la Asociación Nacional de Emplados Fiscales, el Colegio de Profesores, la Corporación de Padres y Apoderados y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios.
El principal reclamo es que las personas al ser traspasadas, fueron ubicadas en grados muy diferentes de los montos equivalentes de sus salarios en el Mineduc.
El Presidente de Andime, Nelson Viveros, indicó que las autoridades jamás le explicaron los contenidos del decreto supremo 338, que crea la Superintendencia, a pesar de que lo demandaron.
Mientras que Alejandro Valenzuela, funcionario de la Superintendencia, indicó que debido a esto se han dejado de fiscalizar cerca de siete mil colegios.
Desde las autoridades el superintendente de Educación, Manuel Casanueva, negó estos hechos e indicó que el proceso de visitas a los establecimientos se ha mantenido “casi” igual.
De la misma manera, Casanueva puntualizó que sólo un 25 por ciento de los funcionarios se han sumado al paro nacional.
Además, agregó que los sueldos tuvieron que modificarse debido a que no hay equivalencias exactas en los grados de los cargos. Sin embargo, que el resto del sueldo se compensó con planillas complementarias, las que irán desapareciendo en la medida que se vayan ajustando los puestos de trabajo.