La decisión de Ecuador de conceder asilo político al fundador de WikiLeaks, el australiano Julian Assange, “no cambia nada”, estimó el jueves el Foreign Office (cancillería británica), que subrayó que las autoridades británicas tienen la obligación de extraditarlo a Suecia.
“Estamos decepcionados” por la decisión de Quito, indicó el Foreign Office en un comunicado. “Pero, de acuerdo a nuestra legislación, dado que Assange ha agotado todas las posibilidades de recurso, las autoridades británicas están obligadas a extraditarlo a Suecia. (…) La decisión del gobierno ecuatoriano no cambia nada”.
Además, la cancillería apuntó que buscaba “todavía una solución negociada que permita (a las autoridades británicas) cumplir (sus) obligaciones en el cuadro del tratado de extradición”.
Este jueves, el gobierno de Ecuador anunció la concesión de “asilo diplomático” a Assange, por considerar que “no tendría derecho a un proceso justo” en caso de que resulte extraditado a Estados Unidos.
El fundador del sitio web WikiLeaks agotó todos los recursos legales en Gran Bretaña para evitar ser extraditado a Suecia, donde es requerido por presuntos delitos sexuales. Assange se encuentra refugiado desde el 19 de junio en la embajada de Ecuador en Londres.