Optimistas por la llegada del invierno, pero muy preocupados por el futuro se manifestaron los apicultores de Los Angeles. La crisis europea y la disminución de abejas, son parte del negro panorama que ya causa estragos entre algunos productores que han quebrado y salido del mercado.
Para los apicultores la llegada del invierno abre la expectativa que las abejas hibernen; y con ello, tengan tranquilidad para una nueva etapa de polinizaciones y producción, siendo lo ideal que se conserven bien, pues la disminución de la población de estos insectos es una de las tantas preocupaciones que los aquejan.
Así lo indicó a La Radio, Julio Beltrán, Presidente de la Asociación de Apicultores de Los Ángeles y dirigente nacional del rubro, quien sostuvo que otra de las preocupaciones es la crisis internacional, que ya está generando que los países -especialmente de la eurozona- busquen otros proveedores a menor precio.
Junto a esto, los apicultores se manifestaron preocupados por las consecuencias que puede tener la disminución de la población de abejas, sobre todo en el proceso de polinización; es decir, la transferencia del polen que generan las abejas.
Aún así, el problema no es sólo a futuro -dice el dirigente- pues hay apicultores a los que la crisis ya los tiene fuera del rubro con nefastas consecuencias no sólo económicas; añadiendo que año tras año la situación puede empeorar.
Finalmente, Julio Beltrán enfatizó que trabajan en un grupo de transferencia tecnológica que está financiado inicialmente por el Estado, que tiene un grupo de expertos desarrollando el tema; añadiendo que son los apicultores los que deben intentar solucionar el complejo escenario que se presenta.