La psiquiatra de la Universidad San Sebastián (USS), Karin Schumacher, afirmó que una buena comunicación y educación con los hijos desde la infancia son las claves para prevenir el consumo de cigarrillos en los niños y adolescentes.
La especialista se refirió a este aspecto con motivo de que hoy, 31 de mayo, se celebra el ‘Día Mundial Sin Tabaco’, y dijo en relación a esto que “es impresionante el número de muchachas chilenas que fuma”.
“Según la cuarta edición del Atlas del Tabaco (2012), el 40% de las adolescentes chilenas entre 13 y 15 años fuma, lo que las convierte en las jóvenes más fumadores del mundo. Mientras que los hombres adolescentes chilenos, ocupan el segundo puesto en el ranking de los más fumadores del continente americano”, expresó la psiquiatra.
Schumacher dijo que “lo más efectivo para evitar que niños y adolescentes fumen, es dar el ejemplo, que los padres y adultos no consuman tabaco. Por otra parte, la buena comunicación es vital ya que es una herramienta efectiva para explicar los efectos nocivos que el cigarrillo produce en el organismo”, manifestó.
Respecto a los factores que inciden en el consumo de tabaco en los más jóvenes, la doctora Schumacher manifestó que hijos con relaciones conflictivas y menos abiertas con sus padres tienen más riesgo de ser fumadores, ya que son menos seguros de sí mismos, pueden tener problemas de autoestima y son mucho más ansiosos”.
“Lo ideal es que los padres y adultos eduquen sobre este tema a los niños desde pequeños (3-4 años). Lo importante es que la comunicación sobre el tabaco sea muy clara, no es necesario caer en ejemplos chocantes, porque no son tan efectivos, pero sí hablar clara y abiertamente sobre las consecuencias mortales que el tabaquismo produce”, detalló la doctora Schumacher.
Por otra parte, dijo que también hay una responsabilidad importante de los padres y adultos de promover la vida sana, del valor y beneficios que ese estilo produce en la vida de una persona, siempre hablando clara y abiertamente.