Un grupo de economistas estadounidenses proponen que la semana laboral sólo dure 4 días, pero que se trabaje 10 horas diarias en lugar de 8.
Según explicó revista Muy Interesante, esta medida permitiría a los empleados descansar 3 días (viernes, sábado y domingo), mejorando su eficiencia y disminuyendo el cansancio. Además, ayudaría a reducir los gastos de las empresas, como electricidad por ejemplo.
“Los empleados pasarían en la carretera un 20% menos de tiempo a la semana” agregó John Langmaid, editor de la revista Connecticut Law Review, quien es uno de los más férreos impulsores de la idea. De esta manera, también implicaría un beneficio al Medio Ambiente al reducir la circulación de vehículos durante un día entero.
Quien también apoya la iniciativa es la investigadora de la Universidad Brigham Young, Lori Wadsworth, quien ha realizado estudios que muestran que esta medida mejoraría el rendimiento de los trabajadores.
Cabe destacar, que la idea ya ha sido puesta a prueba en el estado de Utah (EEUU), demostrando que el no encender las luces, ni los computadores, ascensores y aire acondicionado todos los viernes, ayuda a ahorrar varios dólares en energía.