Dijeron que tenían muchas ganas de volver a Chile y ese entusiasmo se notó. Anthrax dejó todo sobre el escenario, y agradeciendo a la vez la increíble recepción del atestado Movistar Arena. “La mejor audiencia que nunca han tenido”, según ellos mismos dijeron.
La primera jornada del Metal Fest cerró con la esperada entrega de los neoyorquinos que pasadas las 23 horas subieron al escenario con esa energía que no pierden en sus más de 20 años de carrera, con un “indio” Belladonna que parece congelado en los 80, saltando gritando con la misma agudeza.
Con la bandera chilena como parte del escenario, la intro Worship adelantó los dos cortes de su último disco, ‘Earth on Hell’ y ‘Fight ‘em Til You Can’t", ésta última pieza que ya parece hacerse lugar entre los clásicos de la banda.
Luego, el maestro de los riffs Scott Ian y el bajo galopante de Frank Bello desataron ‘Caught in a Mosh’, una verdadera patada que no dejó cabeza quieta en todo el coliseo, que a esa altura superaba los 10 mil asistentes. La pista se convirtió en una rueda gigante de metaleros, como pocas veces se ha visto, tal vez, en el mundo. El clásico coreo de ‘Antisocial’ siguió en esta verdadera fiesta.
Con ‘Indians’ todos cantaron, lo mismo con ‘In The End’, en medio de un imparable mosh que se aceleró con la frenética ‘Got The Time’. Joey Belladonna entre tanto, visiblemente extasiado, vociferaba que ya conocía este “loco público”, y que lo sigue asombrando. También se vio emocionado con la presencia de varios niños que le saludaban entre la multitud.
Y la energía no decae. “Nunca antes hemos tocado esta canción en Chile” advirtió Scott Ian: “la primera canción de nuestro primer álbum”… y los fanáticos ya no la podían creer. “¿Aman el thrash metal?”, interpeló el guitarrista para soltar la contundente ‘Deathrider’, clásico del disco ‘Fistfull of Metal’, debut de Anthrax en 1984. Los solos de Rob Caggiano siguen confirmando que está en el lugar correcto, tras la salida de Dan Spitz.
Se prometía una noche de himnos del thrash y por lo mismo, incluso varios músicos de las bandas anteriores se quedaron para ver el aclamado cierre de esta primera jornada. Así siguieron ‘Medusa’ y ‘Among the Living’, que a su término, los músicos se retiraron y varios en el público siguieron su ejemplo, ya pasada la medianoche.
Cinco minutos de silencio y aparece nuevamente Ian con los acordes de ‘I’m Alive’. Unos segundos de ‘The Ripper’ de Judas Priest fueron la introducción a ‘Madhouse’, seguido de ‘Metal Thrashing Mad’.
El rapeado ‘I’m the Man’ dio paso a la clausura perfecta con ‘I Am The Law’, que hasta el último baquetazo de Charlie Benante, mantuvo enardecido a un público que seguía al pie del cañón, tras casi de 10 horas de metal.
Al despedirse, lanzaron una lluvia de púas y baquetas a las primeras filas, que se les hicieron pocas para agradecer los cerca de 90 minutos de fiesta, porque su música fue complementada con la masa metalera chilena, transformando la cita en un solo espectáculo. Cualidad que hace de nuestro país un lugar recordado por las más grandes bandas de rock.
“¡Long Live Rock n’ Roll!” gritó Belladona antes de irse y la grabación del himno de Rainbow con la voz de Dio, acompañó la salida de quienes fueron testigos de un evento que será recordado por generaciones.
[Gallery 1070 not found]Revisa también el resumen y las postales de toda la primera jornada y el apoteósico cierre.