Un adolescente de 17 años, Shawn Tyson, fue condenado a cadena perpetua tras ser juzgado como adulto por el asesinato de dos turistas británicos en abril del año pasado en Sarasota, una ciudad en la costa oeste de Florida, informaron este jueves fuentes judiciales.
“El jurado lo halló culpable y el juez Rick De Furia lo condenó a dos cadenas perpetuas sin libertad condicional” el miércoles en la tarde, dijo un portavoz de la Corte de Sarasota, 370 km al noroeste de Miami.
Por tratarse de un menor de edad, el adolescente pudo evitar la pena de muerte.
Durante el juicio de ocho días, testigos indicaron que los jóvenes británicos James Cooper, de 25 años, y James Kouzaris, de 24, fueron asesinados a balazos el 16 de abril del año pasado, cuando salieron a pasear del resort donde se encontraban con sus familias a unos 19 km del lugar del crimen.
De acuerdo a medios de prensa de Sarasota, los turistas se hallaban en un barrio de viviendas subsidiadas por el gobierno, descrito por locales como un sector peligroso de la ciudad.
Las familias de las víctimas enviaron un comunicado leído en la sala del juzgado donde expresaron su satisfacción con la sentencia pero admitiendo que ellos mismos viven una “condena de por vida” por este asesinato “brutal e innecesario”.
“Nuestra vida es una condena perpetua, con ninguna posibilidad de libertad condicional para nuestro corazón roto”, señalaron los familiares en el comunicado.
También criticaron a las autoridades de Florida porque una vez que se detuvo a Tyson se conoció que el adolescente había sido liberado erróneamente hacía nueve días de prisión, donde permanecía por haber disparado contra un automóvil repleto de pasajeros.
Un juez había ordenado entonces que se lo mantuviera detenido porque lo consideraba “un peligro público”.