Por Camila Mendoza Muñoz (desde Miami)
Es uno de los chilenos más reconocidos en el mercado hispano en Estados Unidos y hoy vive un año decisivo en su carrera. Puso fin a su contrato de forma anticipada con Telefutura y recientemente firmó con YouTube, sitio web para el cual graba un programa que será lanzado el próximo mes de abril y ya está realizando sus primeros segmentos en inglés y en español.
Felipe es un hombre maduro, reflexivo y sobre todo muy sencillo y accesible. Pasa por una nueva etapa en su vida. Él mismo lo menciona varias veces dentro de la entrevista y está reordenando sus prioridades con la solidez que le entregó estar a la cabeza de su show por 10 años.
Crítico de la televisión, la farándula y el constante chaqueteo, Felipe nos habla de todo y no desestima la posibilidad de trabajar en Chile. “Es hora de que apoyemos el talento que hay en nuestro país, no lo tiremos para abajo. Para mí, indudablemente mi patria es algo importante porque como chileno uno siempre quiere demostrar allá lo que ha podido aprender. Por eso no desestimo hacer programas en Chile, pero no es algo prioritario en mi vida”.
Trabajas en la industria del entretenimiento hace muchos años, ¿qué opinión tienes sobre los programas de farándula y espectáculo en nuestro país?
Yo encuentro que hacer farándula en Chile es tremendamente difícil porque hay que crearla de la nada, aquí no pasa eso. En Estados Unidos el entretenimiento y el espectáculo es muy bien visto debido a que hay muchísimos artistas con tremendas carreras, y bueno… obviamente a la gente le interesa saber de sus vidas. Pero en Chile la mayoría de quienes integran la farándula no son artistas, entonces los programas sólo hablan de la vida privada de ellos y eso es porque no hay nada más de que hablar. Me sorprende que se le otorgue el nivel de celebridad a cualquier persona que sale de un reality.
Siempre llamó la atención que llegaste con mucha humildad a este país. Jamás dijiste que venías a ser presentador de televisión, al contrario, siempre con mucha sinceridad dijiste que harías notas y trabajarías desde abajo en lo que se pudiera.
Efectivamente, quizás es un error, pero en general uno tiene miedo de ponerse metas altas. Cuando a mí me preguntaban, ¿a qué te vas a Miami? Yo respondía, me voy vivir una experiencia y a ver qué se puede hacer. Nunca dije: “voy a Estados Unidos porque me quiero transformar en uno de los animadores latinos más importantes”. Creo que de alguna forma ponerte metas altas te condiciona, y siempre está ese miedo de fallarse a uno mismo, a la familia y a la gente que te quiere y que conoce tu trabajo.
Y finalmente llegaste a ser uno de los animadores latinos más importantes de este país, ¿cómo evalúas tu carrera?
La evalúo como una gran enseñanza. He logrado aquí miles de cosas más de las que yo soñé. He tenido mi programa durante 10 años, he conocido y entrevistado una cantidad de gente enorme. Cuando llegué se me abrió la mente, se me expandió el mundo y los contactos. He hecho cosas que nunca soñé hacer en términos sociales y artísticos.
¿Qué se viene para este 2012 en términos profesionales?
Llegué a un acuerdo con Telefutura y terminé el contrato, pero voy a seguir vinculado con ellos hasta septiembre de 2012 y con la posibilidad de asumir otros proyectos que es lo que quiero. En este momento estoy mirando para afuera, quiero crecer y probar nuevos formatos. Estuve 10 años haciendo “Escándalo TV”, pero desde hace un par de años que quiero trabajar en otras cosas. Ahora me armé de valentía y preferí terminar un contrato de manera anticipada, para tener la opción de negociar otros proyectos.
¿Qué te gustaría hacer en televisión?
En este negocio uno tiene que compatibilizar lo que tú quieres hacer, con lo que se te da la oportunidad de hacer. En mi programa era animador pero también hacía comedia y personajes. Ahora acabo de firmar un contrato con YouTube para hacer un programa enfocado en la comedia. Ponemos a los artistas en situaciones muy graciosas, es un programa muy irreverente y lo hago en inglés y en español.
Es curioso porque yo jamás me hubiese planteado hacer esto, pero mi manager me visualizó así. Y yo le tengo plena confianza porque es el mismo manager que habló con Sofía Vergara en sus inicios, cuando ella aspiraba a ser una modelo colombiana en mundo latino; y justamente fue él quien la proyectó actuando en Hollywood. Entonces es un hombre de mucha experiencia… eso me gusta de este país, uno nunca sabe donde te lleva la industria.
Felipe reconoce que renunció a muchas cosas al dejar su tierra natal, especialmente en términos familiares, pero también con la perspectiva del tiempo manifiesta que volvería a tomar la decisión sin pensarlo dos veces. Esta feliz y orgulloso de sus logros profesionales, pero fundamentalmente de los personales y la familia que ha construido. De sus hijas Celeste y Almendra, no pudo evitar hablar con mucha emoción.
“Mis hijas son mitad chilenas y mitad gringas, hablan inglés y español y viajan a Chile muy seguido. A mí me gusta el concepto de familia cosmopolita, me gusta que mis hijas no tengan prejuicios. Ellas se manejan bien en todos los escenarios, son súper multiculturales y eso es porque tienen compañeros de muchos países en el Colegio, por ello no discriminan”.
El pasado mes de enero la fundación norteamericana “Women in Arts”, que anualmente honra la excelencia en los iconos de las artes, te galardonó por tu influencia y trabajo con la comunidad hispana.
Desde hace algunos años que soy voluntario de un hogar de niños en Haití que se llama “Familias multicolor”, apunta a la adopción de niños. He podido visitar ese país y colaboro dando a conocer la causa. Haití vive una tremenda emergencia humanitaria, son cientos de miles de niños que no tienen familia y tienen múltiples necesidades. Todos nos acordamos de ese pueblo con el terremoto, pero ellos viven una emergencia que viene desde antes. Esa labor le da sentido a mi carrera y a mi trabajo en televisión.
Cuando ocurrió el terremoto y maremoto en Chile también encabezaste un gran evento que se realizó en Miami.
Hicimos el “Miami ayuda a Chile” porque había una responsabilidad como chilenos en el extranjero, con el evento juntamos 300 mil dólares para “Un techo para mi país”. Lo pude organizar porque Emilio Estefan, que es un gran amigo, me prestó su centro de eventos. Llamé a Luis Fonsi, que también nos colaboró gratis junto a Alberto Plaza y otros artistas. Finalmente llegaron más de 2 mil personas al evento, quedamos muy conformes.
A pesar del chaqueteo tan característico de nuestro país, este chileno lleva orgulloso su bandera y espera que algún día el talento que existe en todas las áreas y disciplinas pueda internacionalizarse.
“Siento que en Chile hay una tendencia a no perdonar el éxito. En ese sentido, cuando a alguien le va demasiado bien lo pueden terminar odiando. Creo que ya es hora de que haya más animadores chilenos trabajando afuera, ¿porqué no pensar en un actor chileno nominado al Oscar, si este año hubo mexicano? No tenemos que dejar que la cordillera ejerza un efecto hermético en nosotros”, sentenció Felipe.
Camila Mendoza Muñoz es estudiante de 4º año de periodismo en la Universidad de Concepción.
Actualmente ejerce como periodista en Miami, Estados Unidos, donde realiza entrevistas del mundo artístico, televisivo y de sociedad.