Un grupo de científicos de las universidades de Binghamton (EEUU) y Cardiff (Inglaterra), sumados a investigadores del Museo de Nueva York, lograron desenterrar entero y fosilizado el llamado “Bosque de Gilboa”, que data de hace 385 millones de años; hecho que lo convierte en el suelo de este tipo más antiguo del mundo.
Según lo señalado por ABC.es el estudio del hallazgo, difundido por la revista “Nature”, permitió describir la asombrosa complejidad y riqueza de este viejo paisaje natural.
Al mismo tiempo, no obstante, hizo posible arrojar nuevas luces sobre el papel de los bosques en la actualidad y su incidencia en el cambio climático.
En palabras de William Stein, profesor asociado de Ciencias Biológicas en Binghamton y autor de la investigación, “Fue como descubrir el equivalente botánico de unas huellas de dinosaurio”.
A ello, el científico añadió que “El área recién descubierta fue preservada de tal manera que, literalmente, hemos sido capaces de caminar entre los árboles, sabiendo de qué tipo eran, dónde habían echado raíces y cuánto habían crecido”.
Por último, cabe indicar que este descubrimiento se efectuó en las montañas de Catskill, en el condado de Schoharie, donde en 1920 fueron hallados los fósiles de los árboles más viejos de la Tierra.