Los vecinos de Villa Futuro presentaron un recurso de protección contra Serviu en los Tribunales de Concepción, luego de que el organismo resolviera demoler todas sus viviendas el año pasado.
Que el Serviu deje de acosarlos fue la petición que realizaron 200 familias damnificadas de Villa Futuro en Chiguayante. Tenían la esperanza de que el Gobierno les diera una solución habitacional definitiva, pero señalaron que sólo encontraron más problemas.
Después del terremoto, sus viviendas quedaron calificadas de inhabitables, por lo que les ofrecieron firmar un traspaso y recibir un cheque de expropiación. Sin embargo, estas familias no están de acuerdo con las 700 unidades de fomento para acceder a un proyecto habitacional.
La presidenta de la junta de vecinos, Bárbara Orrego, señaló que ya están cansados que los amenacen para que firmen, pues lo que ellos quieren es que les construyan sus viviendas en el mismo lugar, no en Hualqui o Hualpén.
Entre los que asistieron a la presentación del recurso estaba Ruth Oyarce, a quien le queda poco tiempo para abandonar su departamento. Añadió que así como va el asunto, tendrá que vivir de allegada.
El director del Serviu, Sergio Jara, negó las amenazas y los hostigamientos. Dijo que los resultados están a la vista, ya que tienen 1.320 familias, de las que 1.219 han firmado.
Según Jara, existe nula representatividad en aquellos que manejan a los demás vecinos, mientras que estos últimos, señalaron que no iban a ceder porque quieren seguir viviendo en sus terrenos.