Los Juegos Olímpicos de Atenas tuvieron un peso destacado en la enorme deuda de Grecia y el retraso en las obras se pagó muy caro, indicó este martes en Atenas el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el belga Jacques Rogge.
“Podemos decir con franqueza que los Juegos de 2004 tuvieron su importancia. Si ves la deuda exterior de Grecia, de un dos a un tres por ciento pueden ser atribuidos a los Juegos”, declaró Rogge al diario Kathimerini, con motivo de una visita a la capital griega.
El presidente del COI estimó por otra parte que los Juegos “podrían haber sido menos costosos” si se hubieran respetado los plazos de las obras.
“Hubo retrasos que hicieron necesarios dobles turnos y hacer trabajar a la gente por la noche, lo que es más caro”, subrayó.
Varias de las sedes sólo pudieron ser terminadas unas semanas antes del inicio de la competición, después de un cambio de gobierno a cinco meses de los Juegos provocara más retrasos en la preparación de las infraestructuras.
Los Juegos Olímpicos de Atenas costaron unos 13.000 millones de euros, uno de ellos dedicado a garantizar la seguridad, ya que eran los primeros Juegos tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
En la actualidad, varias de las instalaciones olímpicas todavía no han encontrado un uso viable.
Grecia, país europeo especialmente golpeado por la crisis de deuda, está en su cuarto año de recesión.
La deuda del país supera actualmente los 350.000 millones de euros, lo que supone un 160% de su Producto Interior Bruto (PIB). La contracción de la economía está prevista para más de un 5,5% del PIB en 2011, mientras que para 2012 se espera que la recesión continúa, a un ritmo de -3% del PIB.