La Iglesia católica belga realizará exámenes psicológicos a los seminaristas que aspiren al sacerdocio para impedir que aquellos que muestren tendencias a la pedofilia ingresen a la institución, anunció el máximo prelado del país, sacudido por una ola de denuncias de abusos de menores por parte de sacerdotes.
“La Iglesia debe proteger a sus niños”, subrayó el arzobispo André Joseph Leonard el lunes por la noche a la televisión.
Después de Estados Unidos, Irlanda y Alemania, la Iglesia católica belga se ha visto manchada por un escándalo de pedofilia, con más de 500 denuncias contra sacerdotes.
Las denuncias de abusos sexuales se acumularon contra la Iglesia belga después de que el obispo de Brujas, Roger Vangheluwe, reconociera había abusado sexualmente de un sobrino, lo que lo llevó a dimitir.
La Iglesia preparará un código, que será publicado a la brevedad, para evitar los abusos de menores, explicó.
Los seminaristas que quieran convertirse en sacerdotes serán “rigurosamente analizados”, explicó Leonard.
“Se les hará un perfil psicológico desde el inicio de su formación”, dijo Leonard.
“Serán luego analizados en varias sesiones especiales por psicólogos”, añadió.
Las declaraciones de Vangheluwe provocaron una cascada de denuncias.
En septiembre de 2010, una comisión publicó los testimonios de cerca de 500 personas que acusaban a eclesiásticos de haber abusado de ellos durante su juventud.
La mayoría de los testimonios se referían a abusos cometidos entre los años cincuenta y ochenta, por lo cual han prescrito tanto para la justicia civil como para la eclesiástica.