La presentación que los californianos ofrecieron en Santiago la noche del viernes 16 fue una fiesta encendida al rojo vivo, en donde se dieron cita más de 40 mil personas.
La tercera actuación en Chile de la banda comandada por el cantante Anthony Kiedis y el bajista ‘Flea’ resultó todo un éxito. En una noche que se tornará inolvidable paras sus seguidores, la banda demostró en escena todos los pergaminos que la hacen una de las más grandes del planeta.
Promocionando su más reciente lanzamiento “I´m With You”, Kiedis y ‘Flea’, junto al nuevo guitarrista Josh Klinghoffer y al batero Chad Smith, subieron al escenario diez minutos antes de las 22 horas para entregar un repertorio cargado de grandes éxitos, después de las perfomances de los nacionales Chancho en Piedra y los británicos Foals, quienes cumplieron a cabalidad su misión de estimular al público para recibir al acto estelar.
Haciendo un recorrido por sus principales singles, además de canciones pre “Blood Sugar Sex Magik” como ‘Me & My Friends’, y temas de su último álbum todavía desconocido para el grueso del público, fueron tracks como ‘Can’t Stop’, ‘Under the Brige’, ‘Tell Me Baby’, ‘By The Way’ y ‘Californication’ algunos de los más coreados por la audiencia que en su mayoría fue a escuchar lo hits del grupo.
A pesar que Anthony Kiedis no se esmeró mucho por comunicarse con el público, fue muy gratificante para los asistentes que justo antes del gran cierre con ‘Give It Away’, Flea sacara la voz para apoyar la causa estudiantil exclamando: “Suerte con la educación, educación gratis para todos”, demostrando así el interés del grupo por la contingencia que ataña a sus incondicionales chilenos.
El show del grupo considerado como uno de los más influyentes del rock, también fue una prueba de fuego para el Estadio Monumental que salió más que airoso del desafío, ya que funcionó de excelente manera en cuanto a seguridad, accesibilidad, visibilidad y acústica, demostrando así que es una muy buena plaza para recitales masivos.
A pesar que en ciertos aspectos –como suele suceder en espectáculos de esta envergadura- el repertorio puede haber dejado disconforme a uno que otro fanático, lo que predominó la noche del viernes en el Monumental fue un espíritu de alegría y carnaval, musicalizado por uno de los actos más encendidos y preponderantes de la actualidad.