Estados Unidos volvió a recibir en junio más inversiones de capital a largo plazo de las que destinó al extranjero, pero su excedente en este rubro se redujo considerablemente, según la información publicada este lunes en Washignton por el Departamento del Tesoro.
El saldo positivo de la balanza estadounidense de flujos de capital invertidos a largo plazo cayó 85% en el sexto mes del año en relación a mayo hasta los 3.700 millones de dólares, su nivel más bajo desde mayo de 2009, publicó el Tesoro en sus datos mensuales sobre los capitales internacionales.
La reducción del excedente se explica por el hecho de que los inversionistas extranjeros vendieron más títulos financieros estadounidenses a largo plazo de los que compraron, por primera vez desde enero de 2009.
Los datos del Tesoro muestran que esto resultó de una desinversión neta récord de 23.000 millones de dólares por parte de los inversionistas privados extranjeros, que habían adquirido en un principio los títulos del Tesoro (-18.300 millones de dólares, otro récord).
El mes de junio estuvo caracterizado por serios bloqueos políticos en el sobre el aumento del techo de la deuda pública estadounidense. El debate fue resuelto in extremis, a principios del mes de agosto.
Según el departamento de Finanzas, los inversionistas chinos (incluyendo a los de Hong Kong) siguen siendo, por lejos, los principales tenedores extranjeros de la deuda federal estadounidense y el saldo de sus haberes en obligaciones de Estado aumentó 1,7% en junio, para alcanzar 1,283 billones de dólares.
Le siguen los japoneses (911.000 millones de dólares: -0,2% con respecto a mayo) y los británicos (349.500 millones, sea 0,8% más que el mes anterior).