El ex presidente de Colombia Alvaro Uribe criticó el desempeño en materia de seguridad de su sucesor, Juan Manuel Santos, a la vez que expresó discrepancias con una recién sancionada ley para reparar a las víctimas del conflicto armado, en una entrevista este lunes.
“Hay deterioros en muchas partes del país”, dijo Uribe al diario La Tarde de Pereira, al referirse a la política de seguridad democrática, de combate frontal a las guerrillas izquierdistas y la más popular de su gobierno (2002-2010).
“Cuando hay deterioro, si no se corrige a tiempo, se desestimula la inversión y se queda sin recursos para pagar, por ejemplo, la Ley de víctimas”, añadió el ex mandatario de derecha.
Santos, quien ganó la presidencia de Colombia en 2010 con el apoyo de Uribe, y fue ministro de la Defensa de su gobierno entre 2006 y 2009, cargo desde el cual asestó duros golpes a la guerrilla comunista Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Pero en los últimos meses, Uribe ha expresado frecuentemente diferencias con el gobierno de Santos, el más reciente de ellos por el reconocimiento que se dio en la Ley para reparar a víctimas del conflicto armado.
Esa ley fue promulgada por Santos el pasado 10 de junio, en un acto al que asistió como testigo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
“El presidente Santos, como ministro, se opuso a la Ley de víctimas. No pudimos sacarla adelante porque había aspiraciones de la oposición de dinero que no podíamos cumplir, y por el tema de las Fuerzas Armadas”, dijo Uribe en la entrevista publicada este lunes.
“Siempre he sido de la tesis de que no se pueden tratar lo mismo a las Fuerzas Armadas que a los victimarios guerrilleros y paramilitares”, añadió en alusión a la ley que no discrimina entre víctimas de los grupos armados ilegales o de la fuerza pública.
Finalmente, Uribe se refirió a las investigaciones que se han abierto por supuestos hechos de corrupción durante su gobierno y ratificó que acudirá esta semana a rendir testimonio ante el parlamento por un escándalo de escuchas y seguimientos ilegales.
“Este gobierno no necesita graduarnos de corruptos para adelantar su política contra la corrupción. Van desacreditando un gobierno que trabajó con patriotismo y entonces me toca defenderme”, se lamentó.