La Defensoría del Pueblo de Colombia expresó este domingo su preocupación por la grave situación de cerca de 1,8 millones de niños trabajadores del país, y denunció la utilización de muchos de ellos en prostitución, pornografía y por parte de grupos armados ilegales.
El defensor del Pueblo (Ombusman) Volmar Pérez, “manifiesta preocupación por la grave situación en que viven niños y niñas por efecto de las violaciones a sus derechos”, señala un comunicado con ocasión del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, que se conmemora este 12 de junio.
Pérez llamó la atención “respecto de la urgencia de erradicar las conocidas como peores formas de trabajo infantil”, como la incorporación forzosa de niños para el conflicto armado, el reclutamiento o la oferta de niños para la prostitución y la producción de pornografía o actuaciones pornográficas.
Según el Defensor del Pueblo, con base en cifras oficiales, hasta 2009 se reportaban en Colombia 1.050.147 niños y adolescentes que ejercían una ocupación, remunerada o no, en la producción de bienes y servicios.
Pero a ello, anotó, se agregan los menores que trabajan en oficios domésticos durante más de 15 horas a la semana, cifra que se ubica en 799.840, con lo que “la magnitud del trabajo infantil llega a 1.849.987 niños”.
El funcionario advirtió que no se cuenta con información precisa el número de niños que son empleados en “las denominadas peores formas de trabajo infantil”.
Al respecto, en declaraciones a periodistas este mismo domingo, Pérez precisó que modalidades como la prostitución infantil tienen sus principales focos en ciudades del norte del país, así como en las fronteras con Venezuela y Ecuador.
“Esos niños se localizan básicamente en ciudades de la Costa Atlántica y en ciudades fronterizas del país”, dijo el funcionario.
Además, según la Defensoría, entre 6.000 y 11.000 niños forman parte de los grupos armados ilegales que operan en Colombia.