El ucraniano Vitali Klitschko conservó su título de la categoría de pesados del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), este sábado en Colonia, ante el aspirante cubano Odlanier Solís, en un combate que fue detenido en el primer asalto por lesión del caribeño.
El mayor de los Klitschko, de 39 años, ganó así su decimocuarta pelea por un título mundial y firmó su 42ª victoria, de ellas 39 por nocáut, y en su palmarés continúa con dos únicas derrotas.
Por contra, el cubano Solís, campeón olímpico en Atenas-2004 y triple campeón mundial en categoría de aficionados, sufrió su primera derrota en 18 combates.
La pelea decepcionó y apenas tuvo historia: tras varios intercambios de golpes, un golpe aparentemente anodino de Klitschko casi al final del primer asalto terminó siendo decisivo para precipitar el final, ante el estupor y la perplejidad del público congregado en el Lanxess Arena de Colonia.
Solís se tambaleó tras el golpe, apoyó la pierna izquierda para guardar el equilibrio y se lesionó en la rodilla en la caída.
“Le he dado en plena cara, era un golpe potente y no ha querido continuar el combate”, resumió Klitschko, que ha ganado 42 peleas de 45.
El cubano, nueve años menor, dio una versión muy diferente de lo ocurrido en el ‘ring’ de Colonia.
“Me hizo daño al caer. Son cosas que pasan el boxeo”, insistió en la noche de su primera derrota en categoría profesional, aludiendo a la “mala suerte” como causa principal del incidente.
La pelea, casi un entrenamiento para la estrella ucraniana, supone un éxito más en la carrera del veterano púgil, que cumplirá 40 años en julio.
Vitali Klitschko es atacado a menudo por parte de sus adversarios recordándole su edad, especialmente desde su victoria anterior, a los puntos en octubre contra un adversario modesto, el estadounidense Shannon Briggs. Su objetivo contra Solís era acallar las críticas, pero apunas tuvo tiempo.
El ucraniano consiguió defender con éxito su cinturón CMB por sexta vez, desde que lo conquistara en octubre de 2008 en Berlín, contra el nigeriano Samuel Peter.
Con su hermano pequeño Vladimir con los títulos de pesados de la Organización Mundial (OMB) y la Federación Internacional (FIB), sólo el británico David Haye parece poner en apuros la hegemonía familiar en la categoría. Haye se verá con Vladimir en junio o julio.