El comité permanente de la Conferencia Episcopal de la Iglesia Católica, que preside el arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, emitió una declaración con motivo del tiempo de cuaresma en la que llaman a la “generosidad” del Estado con las personas privadas de libertad y expresan también su “compromiso inequívoco” contra los hechos de abusos en que se han visto envueltos sacerdotes durante el último tiempo.
Sin aludir directamente casos como el del ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima, los obispos plantearon que “las dolorosas situaciones que han causado, con toda razón, escándalo en la comunidad nacional, nos desafían hacia una profunda conversión. Sólo en la transparencia, la justicia y el amor de Cristo hallaremos respuestas a los cuestionamientos y desafíos que surgen de estos lamentables casos de abuso que involucran a consagrados”.
“Nuestra cercanía hacia las víctimas y a las comunidades que más sufren el daño causado, se debe traducir, también, en un compromiso inequívoco de todos en la Iglesia para prevenir que estos hechos se repitan y para actuar, ante ellos, con caridad en la verdad”, aseguraron.
En el texto titulado “Es tiempo de purificación, tiempo de misericordia”, las autoridades eclesiásticas destacaron “la voluntad de amplios sectores de avanzar en decisiones políticas, legislativas y judiciales que permitan encarar esa grave deuda social que constituye la precaria situación de los internos en las cárceles del país”.
Según la alta jerarquía católica nacional “es un asunto de justicia que quienes han transgredido las normas de convivencia social cumplan las penas que la misma sociedad ha establecido. Pero también es un asunto de justicia asegurar condiciones de vida dignas a las personas privadas de libertad”.
“Como hemos planteado en nuestra propuesta con ocasión del Bicentenario, creemos que una sociedad se dignifica cuando obra desde la clemencia y la misericordia en favor de los reclusos y reclusas más ancianos, enfermos y que no revisten mayor peligro para la sociedad. Para los poderes del Estado que, conforme a la Ley determinarán las medidas de estas iniciativas, imploramos sabiduría y generosidad en esta hora”, expresaron.
La declaración del comité permanente también se refiere al terremoto y tsunami que afectó a Japón, y la alerta de tsunami en las costas chilenas, destacando que la experiencia vivida el fin de semana pasado “demuestra que somos capaces de emprender en conjunto acciones para proteger nuestra vida, cuidando a los más indefensos y preocupándonos por las poblaciones en mayor riesgo”.