Afirmando que no cree en los boicots culturales y que éstos sólo han conseguido el éxito una vez, Sting, tras 28 años, vuelve a los escenarios de la Quinta Vergara.
El músico, quién vino a Chile en pleno régimen del general Augusto Pinochet, agregó que los intentos de forzar un gobierno dictatorial solo derivan en una paranoia.
Sin embargo, consultado por La Radio respecto de si no era un contrasentido en su compromiso por los derechos humanos el que hubiera actuado privadamente para la hija del dictador de Uzbekistán en febrero de 2010, el británico agregó que en los países donde existen gobiernos totalitarios, los artistas deben sacrificar sus cosmovisiones y visitarlos para llevar su mensaje de libertad.
El cantante y compositor traerá esta vez a la Ciudad Jardín, el ecléctico sonido de su nueva gira que lleva a cabo desde el pasado mes de junio, llamada “Symphonicity Tour”, en la cual se presentará junto a 45 músicos de la Orquesta Sinfónica de Chile.