El devastador tsunami del 27 de febrero, destruyó 500 embarcaciones de la región. Por esto, y en la búsqueda de entregar un grano de arena, en la reconstrución del país, 4 empresas de la zona lanzaron la campaña “Mar de Esperanza”. Nueve meses, de arduo trabajo, que vió sus frutos con 35 botes, completamente equipadas, para que pescadores artesanales de 15 caletas del Bío Bío, pudieran volver a la Mar.

El último navio en ser donado, fue para Alejandro Irribarra, de 65 años, que tras la avasalladora ola, quedó sin sustento para mantener a su esposa e hijas.

Daniel Villa, fue uno de los primeros en recibir sus implementos en Tubul. Con cuatro familiares más, volvieron a realizar lo que mejor saben, pescar.

El Presidente Nacional de la Federación Regional de Pesca, Hugo Arancibia comentó que gracias a la entrega de estas 35 embarcaciones son 140 las familias que pueden retornar a sus labores.

En total fueron casi 300 millones de pesos, que personas comunes y corrientes e incluso desde el extrangero y también empresas, donaron para que estas familias, recuperaran una parte de todo lo perdido y así reconstruir, las nuevas redes, que esperan llenar en las devastadas costas del Bío Bío.