En el Partido Radical no descartan el quiebre definitivo con la Concertación, si ésta no modifica su mecanismo de toma de decisiones. Esto en el marco de los desacuerdos internos tras la aprobación a la reforma educacional del Gobierno.
El próximo lunes se reunirá el Consejo Ejecutivo Nacional del Partido Radical para analizar lo que -aunque algunos se niegan a reconocer públicamente- es la crisis más profunda que vive la Concertación desde su nacimiento hace 23 años.
La votación dividida del proyecto de la reforma educacional gatilló una serie de críticas cruzadas, escenario en el cual los diputados del Partido Radical decidieron congelar su participación en las reuniones de coordinación con el resto de las bancadas del bloque opositor.
El jefe de ese grupo parlamentario, Marcos Espinoza, precisó que la medida sólo puede revertirse si la Concertación modifica la forma en que toma definiciones en materia legislativa, terminando con la prácticas de que un número reducido de parlamentarios se arroga la facultad de decidir por todos.
Agregó que si no se corrige el rumbo, el quiebre definitivo con el conglomerado es una opción no descartada por el Partido Radical.
Sin embargo, algunos en la Concertación ponen en duda las verdaderas intenciones de la bancada de diputados del Partido Radical, detrás del congelamiento de su participación en las reuniones con sus aliados.
El vicepresidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chaín, dijo que aunque efectivamente la reforma educacional traerá importantes costos políticos para el bloque, esto parece ser un nuevo arrebato veraniego de los radicales.
Otros en la Concertación prefieren poner paños fríos a la evidente crisis del conglomerado. El senador demócrata cristiano Jorge Pizarro, apuesta por el diálogo para consensuar posiciones para enfrentar las otras 6 reformas que el Gobierno promoverá este año en el Parlamento.
El lunes, en tanto, el difícil momento de la Concertación será analizado en la reunión semanal de los jefes de sus partidos, en un encuentro marcado por las críticas cruzadas por la división en el trámite de la reforma educacional.