El año que viene quisiera que nos juguemos a fondo por terminar con el estado actual de cosas. Que sea como en 1986, donde junto a muchos, pusimos las ganas, el corazón y la vida a disposición de querer terminar y no aguantar más y liberarnos de la dictadura. Millones de seres de mi patria se la jugaron, cada uno haciendo lo suyo.
La mayoría pensó que las cosas cambiarían, pero a poco andar nos enteramos que traicionaron la idea primaria de “vivir mejor todos”. Que siguieron vendiendo la patria y negaron darnos, a nuestra clase, lo que merecía, por ser el sujeto social que posibilitó el deshacernos de esa miliquería fasistoide.
Creo que podemos hacerlo otra vez. Deshacernos de esa minoría arrogante y ahora traidora, pero desde un proyecto donde los pobres, donde el pueblo esté y seamos el centro de la política y la preocupación humana, donde la mayoría decida informadamente.
Otra vez no avalaremos un proyecto que siga favoreciendo a la odiosa minoría.
Nuestro proyecto debe ser Patriótico, Popular y Andino, conductor de las mismas ideas en el plano regional internacional.
Ser mocito del imperio y andar apagando rebeliones o seguir concentrando la riqueza en pocas y menos manos. Eso es impresentable.
Tengo la sensación de que la misma idea recorre las mentes de mujeres y hombres laborantes de nuestra Buena Patria. Nos falta poner las ideas centrales a ese Proyecto, las grandes, las que nos hagan tener buena vida. Es un proyecto que debemos hacer nosotros y no como ha sido hasta ahora, desde la intelectualidad y la política.
En lo nuestro, los trabajadores nos juntaremos y tendremos una Gran Central Única, donde exista la revocabilidad y donde tener la representación de un sindicato, como sus cotizaciones previsionales al día, será cuestión básica para quienes se ganen el derecho a dirigirnos. También el sacar del movimiento obrero a tanto traidor suelto. Eso lo resolveremos todos los trabajadores, cada hombre un voto, para terminar con organizaciones de pantalla.
Sé que esto no ocurrirá por sí solo. Debemos creérnosla, darnos ánimo y ponernos el overol, para no solo hablar del tema, sino más bien hacerlo. Los trabajadores necesitamos la unidad, eso nos hace indestructibles, necesitamos un instrumento de discusión y planificación.
Pero uno desde nosotros, por nosotros, para nosotros y nuestras familias.
Que el año que viene, seamos capaces de unirnos, para caminar en busca de la Buena Vida.
Jorge Bustos
Presidente de Congemar
Confederación Gente con Mar