Más de trescientas personas afectadas, diez casas dañadas por derrumbes, puentes cortados y animales muertos fue el saldo de las fuertes tormentas eléctricas y torrenciales lluvias que -en pleno verano- afectaron a la cordillerana comuna de Lonquimay.
En total fueron 317 personas de distintos sectores de la alta cordillera que sufrieron daños en sus viviendas por las fuertes granizadas que acompañaron a las tormentas eléctricas ocurridas durante los últimos días, según lo dio a conocer la Onemi en el primer informe.
El fenómeno natural ocasionó desbordes de ríos y afluentes, el corte de 3 puentes y derrumbes de laderas que arrasaron con todo a su paso, incluyendo algunos animales.
La encargada de la Oremi, Karen Peña, realizó un catastro en terreno que arrojó un saldo de 10 viviendas dañadas por el agua, el lodo y las piedras arrastradas desde los cerros.
Maquinaria de vialidad y del municipio se encuentra en el sector reparando los caminos y encausando los ríos para prevenir alguna situación de peligro.
Mientras tanto el Comité de Emergencia local permanece alerta ante los sistemas frontales anunciados para los próximos días, que producirían nuevas tormentas eléctricas y lluvia con granizo.