Los países occidentales se reunieron de forma secreta para preparar el apoyo a la resistencia afgana después de la invasión soviética de Afganistán, según documentos británicos de 1980 protegidos por el secreto de defensa durante 30 años y difundidos este jueves.

Según estos documentos, preservados en el Archivo Nacional, altos responsables británicos, franceses, alemanes y estadounidenses se reunieron en París el 15 de enero de 1980, justo después de la invasión soviética de diciembre de 1979, para preparar la reacción occidental.

El consejero para la seguridad nacional del presidente estadounidense Jimmy Carter, Zbigniew Brzezinski, participó en la reunión, con el secretario del gabinete británico, Robert Armstrong, quien sugirió que el apoyo a los muyahidines fuera coordinado por “nuestros amigos”, en referencia a los servicios secretos, entre ellos el MI6 británico.

Según Armstrong, “por poco que haya afganos dispuestos a luchar y a resistir a la invasión soviética, como los guerrilleros en las montañas, y que los paquistaníes estén dispuestos a aceptar que su territorio, en especial los campos de refugiados, sea utilizado como base de operaciones de guerrilla, el interés de Occidente es alentar y apoyar a la resistencia”.

“Esto hará difícil el proceso de pacificación de Afganistán por los soviéticos, y lo hará más largo”, precisa Armstrong.

“La existencia de un movimiento de guerrilla en Afganistán polarizaría la resistencia islámica, que nosotros querríamos ver continuar”, agrega.

La resistencia de los muyahidines vino acompañada en Afganistán del aumento de los grupos islamistas, alimentando la amenaza de Al Qaida.

Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, una coalición internacional dirigida por Washington derrocó el régimen talibán en Afganistán, iniciando un conflicto contra la resistencia islamista que ya lleva más de nueve años.