El presidente del Inter de Milán, Massimo Moratti, se negó hoy a comentar el asunto que concierne a su entrenador Rafa Benítez, tras las diatribas lanzadas por el español el pasado sábado, después de que el club italiano se llevara el título de Mundial de Clubes.
“Estad tranquilos, hoy no hablo, no quiero crear polémica con nadie”, explicó Moratti, refiriéndose a la situación del sustituto del portugués José Mourinho.
Benítez, por su parte, aprovechó el triunfo para dar un golpe de autoridad: “o llegan fichajes o el proyecto puede venirse abajo”.
“Existen tres posibilidades: la primera que me apoyen y vengan ahora cuatro o cinco jugadores para hacer un equipo aún más fuerte. La segunda es continuar de la misma manera, sin proyecto ni planificación, seguir adelante y llegar a mayo así. Y la tercera es que hablen con mi representante”, precisó Benítez.
Por su parte, la prensa italiana informó este lunes de la probable destitución del entrenador ibérico, quien se marchó a Liverpool para pasar con su familia las vacaciones de navidad.
El brasileño Leonardo, Luciano Spaletti del Zenit San Petersburgo o Walter Zenga son algunos de los nombres que se hallan en la agenda de posibles sustitutos de Benítez.