La película peruana “Contracorriente”, ópera prima de Javier Fuentes-León se estrenará este fin de semana en Nueva York y Los Angeles, ciudad donde vive este ex médico dedicado al cine y que podría dar a Perú una segunda nominación consecutiva a los próximos premios Oscar.
“Undertow”, como se titula la cinta en inglés, cuenta una historia de amor complicada por tratarse de un pescador casado y un pintor bohemio en un pequeño pueblo costero peruano.
“Mientras buscaba financiamiento para la película se me dijo mucho que no me hiciera esperanzas porque era una película para un nicho, para la comunidad gay, que no era una película que iba a llegar a mucha gente, y la película demostró lo contrario por sí sola y se ha abierto camino”, dijo a la AFP el cineasta.
El filme que Perú presentó como su candidata a una nominación para el Oscar a Mejor Película Extranjera viene cosechando buena crítica desde el Festival de San Sebastián de 2009 y tras el premio del público en el último festival de cine de Sundance, ha sumado 39 galardones internacionales, entre ellos 21 por parte de la audiencia.
“Ahora ‘Contracorriente’ está preseleccionada a las nominaciones de los próximos premios Goya, y no deja de alegrarme y sorprenderme la respuesta en audiencias tan distintas”, dijo sobre la obra realizada con menos de un millón de dólares con financiamiento de Perú, Colombia, Francia y Alemania.
La cinta abrirá en dos de las capitales del entretenimiento de Estados Unidos este fin de semana largo en Estados Unidos con una cartelera bombardeada de grandes producciones de Hollywood.
Sin embargo, contrario a los estrenos de superproducciones, “Contracorriente” contaba el miércoles con 86% de críticas positivas en la prensa norteamericana, según el sitio web especializado en cine Rottentomatoes.com.
“Situada en un pequeño y pintoresco pueblo pesquero peruano, esta es una historia no tanto de aceptación sino de entrega amorosa enmarcada en el realismo mágico”, dijo la crítica de la guía cultural neoyorquina The Village Voice.
“Contracorriente” se suma a otras producciones de Iberoamérica que abordaron la homosexualidad en su historia y que tuvieron grandes reconocimientos de la crítica, entre ellas la cubana “Fresa y chocolate” (1994); la mexicana “El callejón de los milagros” (1995); la peruana “No se lo digas a nadie” (1998); o la argentina “Plata quemada” (2000).
El cine peruano lleva más de un año sorprendiendo en Festivales alrededor del mundo, sobre todo por la nominación al Oscar 2010 de “La Teta Asustada” de Claudia Llosa, “Octubre”, de los hermanos Daniel y Diego Vega, que ganó en mayo el Premio del Jurado de la sección oficial Una Cierta Mirada del 63º Festival de Cannes y “Paraíso”, de Héctor Gálvez que fue seleccionada en el último Festival de Venecia.
“Creo que todo esto se debe por una parte a una coincidencia muy bonita para un país y a la creación de Conacine” en los años 90, dijo Fuentes-León convencido de que “sí funciona invertir en cultura en cualquier país y los frutos se ven”.